Además del partido disputado por la tarde en Pasarón, el Lugo realizó ayer un entrenamiento en A Campiña. Fue por la mañana. La novedad la protagonizó Rafa García, última incorporación de los rojiblancos, que se puso a las órdenes de Setién.
El mediocentro explicó que se estaba entrenando con el Rayo Vallecano hasta que se desvinculó del conjunto madrileño para recalar en el Lugo. Y sus primeras sensaciones como rojiblanco fueron positivas: «El grupo me ha acogido bastante bien. Poco a poco, intentaré meterme en dinámica y coger los conceptos del míster. Estoy con muchas ganas».
Rafa García también emitió un veredicto sobre cómo contempló al Lugo desde la distancia la pasada campaña, cuando militaba en el Xerez: «No conocía muy bien el equipo, pero, viendo su primera vuelta y cómo jugaban, no me sorprendió lo que hicieron. Hacían un fútbol muy bonito y vistoso».
Además, el jugador manchego estima que se adaptará a las mil maravillas a la filosofía de Quique Setién: «A todo futbolista le gusta tener trato con la pelota, estar en un equipo que sea valiente y arriesgue».
Sobre el papel, por los nombres de los rivales, todo invita a pensar a que la competición de Segunda será muy exigente en el curso 2013-2014. Al respecto de esta circunstancia, el mediocentro rojiblanco apela a la prudencia: «Hay que verlo todo en el campo. Es verdad que han bajado equipos con mucho nombre y trayectoria. Además, quedan otros que lucharon por el ascenso y no lo lograron. Nosotros tenemos el objetivo de la permanencia, y, si hay que mirar un poquito más allá, intentar mejorar lo del año pasado. Estamos en un club humilde y no hay que volverse locos».