Científicos y mariscadores comprueban cómo esta especie introducida ha desplazado al bivalvo gallego causando un daño a la biodiversidad marina
26 dic 2023 . Actualizado a las 04:45 h.Las especies foráneas o introducidas, a diferencia de las autóctonas, son las que mejor se han adaptado a los cambios que se han introducido en la ría de Ferrol tanto por condicionantes locales como globales —cambio climático, aumento de la temperatura del agua o de la atmósfera—. Sin embargo, en algunos casos, esta mejor supervivencia de estos mariscos foráneos acaba perjudicando de forma seria la presencia de especies locales. Es el caso de la ostra rizada o japonesa, que está desplazando al mejillón.
El jefe de la Estación de Bioloxía Mariña de A Graña, dependiente de la USC, Guillermo Díaz, explicó que «desde hai un par de anos está a desaparecer o mexilón da ría de Ferrol» desplazada por la ostra japonesa o rizada: «Sobre todo nas zonas de fóra como San Cristovo antes víase cinturóns negros de mexilón, agora só quedan nas grietas, nos recunchos pequenos».
Sin embargo, sí se detectan grandes manchas blancas formadas por ostras rizadas que han desplazado al mejillón en gran parte de la costa norte, desde Ferrol hasta Ribadeo. «Cada vez hai máis ostra rizada, que véndese peor que a de aquí, porque ten menor valor comercial», explica Díaz Agras.
Mejillón y ostra rizada compiten por el mismo espacio en las zonas rocosas, «co agravante de que nos últimos tempos está a gañar a ostra».
El patrón mayor de Barallobre (Fene), Jorge López, indicó que, además, lo que han comprobado los mariscadores es que en aquellas rocas en las que se asienta la ostra rizada «no crece nada más alrededor». A diferencia de lo que ocurre con el mejillón: «Constrúen estruturas nas que viven moitos animais, entre elas, as lapas, entón estanse perdendo outras moitas especies, que aínda que non teñen interese comercial, si con moi importantes para o ecosistema», manifestó el jefe de la Estación de A Graña.
De esta forma, no solo está desapareciendo el mejillón de la ría, sino también muchas especies que se desarrollaban hasta ahora en su entorno.
En el caso de la almeja, también se está dando la circunstancia, señalan los expertos, de que están adaptándose mejor a los cambios y resistiendo mejor la especie introducida, que es la japónica, que la babosa, que desde hace dos o tres años han caído las capturas a niveles históricos.