Pese a las declaraciones de políticos de una y otra sigla, la constitución efectiva del área metropolitana como órgano de gestión supramunicipal queda pospuesta hasta después de las elecciones del próximo mes de mayo. Los intereses dispares de cada alcalde, las pretensiones de controlar los órganos de decisión y la cercanía de la cita con las urnas ha hecho imposible consensuar la creación de un ente colegiado para gestionar los temas que afectan a más de cuatrocientos mil habitantes de toda la comarca coruñesa.
El presidente del Consorcio das Mariñas, Julio Sacristán, recordó ayer que «es A Coruña y su alcalde los que no han dado los pasos necesarios para integrarse en el Consorcio». Sacristán recordó que «el primer paso es un acuerdo plenario en el que se solicite la incorporación y se diga qué servicios se quieren consorciar. Eso era lo previsto, junto con la aceptación de los estatutos previamente consensuados y, que yo sepa, ese paso no se ha dado», añadió.
Sacristán no se resigna aún a dejar pendiente esta asignatura para después de las municipales. «El Consorcio das Mariñas está listo y solo falta que A Coruña cumpla con sus compromisos», manifestó el regidor cullerdense.
Por su parte, el portavoz municipal del PP, Carlos Negreira, afirmó ayer que la falta de consenso en el área metropolitana «es uno de los temas que pone en evidencia la falta de liderazgo y de capacidad de diálogo de Javier Losada. Ni sus compañeros quieren hablar con él». El concejal criticó que, en todos estos años, el alcalde coruñés no ha sido capaz de «cumplir sus promesas, para generar un espacio metropolitano atractivo de más de 500.000 habitantes, que sea capaz de generar riqueza y sobre todo empleo».
Por último, Negreira constató que la creación de este ente supramunicipal «es la gran asignatura pendiente que debe anotar Losada en su lista de lo que debe. Esta situación pone de relieve el perfil tan bajo de este señor en los últimos años».
Un largo proceso
La creación del organismo supramunicipal acumula ya más de 26 años de tentativas fallidas desde que se constituyera en 1985 la llamada Mancomunidad. El ente se reunió apenas siete veces, para elegir a los representantes y poco más, pero las guerras internas entre algunos de los alcaldes de la comarca y el entonces regidor coruñés, Francisco Vázquez, hicieron inviable el funcionamiento de la Mancomunidad. Hoy en día, aún colea un pleito promovido por Oleiros en el que reivindica un reembolso de más de 500.000 euros.
En el año 2000, los municipios de la comarca decidieron aliarse, sin A Coruña, que prefirió no sumarse, para gestionar algunos servicios comunes, fundamentalmente la recogida de residuos. Fue el origen del Consorcio das Mariñas, que aún hoy sigue funcionando en temas como las basuras, el turismo y la colaboración supramunicipal.
Los intentos de agrupar también a la cabecera comarcal se retomaron en el 2004, en una reunión entre Francisco Vázquez y Julio Sacristán, que sirvió para desbloquear algunos temas pendientes. Pero este nuevo intento también cayó en saco roto.
Tras el cambio de alcalde en A Coruña, Javier Losada indicó que la creación de una entidad supramunicipal sólida era uno de sus grandes objetivos. Era el año 2006 y en el trienio siguiente se fueron dando pasos para crear un consorcio realmente unido.
Fraguó ese supuesto pacto en septiembre del 2009, cuando las dos partes, el Consorcio y A Coruña, acuerdan en una reunión en el palacio municipal de María Pita «dar un paso histórico para modificar los estatutos y facilitar la integración de la ciudad en As Mariñas».
Las buenas voluntades se diluyeron de inmediato. La comarca, liderada por el alcalde de Oleiros, Ángel García Seoane, y el de Abegondo, José Antonio Santiso Miramontes, intentó imponer unas condiciones de control en las que A Coruña quedaba en minoría a la hora de la toma de decisiones.
Los desencuentros se sucedieron y ahora todas las partes han decidido esperar a conocer el nuevo mapa político tras las municipales para intentar retomar las negociaciones y crear, por fin, el área metropolitana.