Las entidades han firmado un convenio para colaborar durante los próximos cuatro años
12 oct 2015 . Actualizado a las 18:02 h.El Club Atletismo Sada (CAS), una de las entidades deportivas que ha experimentado más crecimiento en los últimos años, busca aliados en casa y los ha encontrado en uno de los sellos de identidad del municipio: la fábrica de cerámicas O Castro, de Sargadelos. Si el nuevo equipo de gobierno municipal ha decidido recuperar el logo de Sada diseñado en su día por Isaac Díaz Pardo y utilizarlo en lugar del escudo tradicional, el CAS ha optado por incorporar a todos sus trofeos el sello creado por este intelectual junto con Luis Seoane, y trabajará con la empresa durante los próximos cuatro años.
La primera muestra de esta colaboración ha sido la quinta Carreira da Auga Gotas para Níxer de Sada, en favor de Unicef, para la que Sargadelos diseñó distintivos en forma de gota para los ganadores -una adaptación del logo internacional de este iniciativa- además de varias medallas. «En vez de ir a comprar fuera, en ocasiones lo más barato, es mejor comprar en casa», asegura el presidente del CAS, Fernando Míguez, quien considera que el convenio de colaboración, que tendrá una vigencia cuatrienal, permitirá dar visibilidad a ambas entidades y aprovechar las sinergias.
Entre los objetivos de este acuerdo de colaboración está tanto darle repercusión a una marca íntimamente unida con el municipio como a la propia actividad deportiva que desarrolla el club, que también ha empezado a utilizar el auditorio de Sargadelos para sus actos, como la propia presentación de la carrera solidaria de Unicef, que se desarrolló bajo una tromba de agua el pasado día 4 con más de dos mil participantes. «Si todos nos podemos ayudar, adelante», agregó el presidente de la entidad.
Los aficionados al atletismo de Sada también van a tener muy presente la colaboración del CAS con Sargadelos en cuanto estén instalados en el paseo marítimo de la localidad el panel informativo y los marcadores de distancias recorridas, que serán, evidentemente, unas placas diseñadas y elaboradas por la cerámica de O Castro, cuya colocación estaba pendiente de la autorización de la Dirección General de Sostenibilidad de la Costa y del Mar.