Han atrapado a sus clientes con recetas propias a base de ingredientes «de aquí y de allá»
09 feb 2018 . Actualizado a las 11:48 h.Los amantes de la cerveza y de las propuestas gastronómicas atrevidas y originales tienen en este local de la Galera su paraíso particular. Situada inicialmente en la calle Panaderas, la cervezoteca Malte se trasladó en el 2012 a una ubicación más céntrica para tratar de captar el mayor número de público y «acercarlo a una bebida con un mundo alrededor que todavía estaba por explorar», explica su propietario, Juan Fernández. Ocho años después pueden presumir de haberlo logrado, en parte, gracias a una carta cambiante que se adapta a todo tipo de paladares y bolsillos.
Trabajan con cervezas artesanas y de importación, tienen 20 grifos -de los cuales hay cuatro fijos- y cuentan con más de 300 referencias que se pueden degustar en el local o llevarlas a casa. Una de las de mayor aceptación es la Abadía da Malte, una cerveza propia que elabora la empresa ourensana In Peccatum con una receta exclusiva para ellos. «O vienes aquí, o no tienes opción de beberla en ningún otro sitio», comenta orgulloso el alma máter del establecimiento.
Al frente de su cocina «de aquí y de allá» está Iago Vilariño, quien a base de mezclar recetas, técnicas y productos gallegos de temporada y de mercado con otros menos habituales de diferentes partes del mundo ha conseguido elaborar una carta repleta de combinaciones únicas que difícilmente dejan indiferente a quien las prueba. «Buscábamos hacer una cocina más divertida, y al maridarla con cerveza, además se hace más desenfadada», asegura su dueño. El reducido tamaño de su comedor goza de un ambiente distendido e informal logrado a base de platos cómodos y fáciles de compartir.