La diputada de Oleiros Tristana Moraleja abrió los gritos de «Viva el rey» tras el discurso de Felipe VI
A CORUÑA
«Fue un acto espontáneo y de rebeldía contra aquellos que no respetaban el discurso del monarca», señala
05 feb 2020 . Actualizado a las 05:00 h.«Fue algo espontáneo, surgió así, en décimas de segundo». Felipe VI acababa de concluir su alocución en el Congreso de los Diputados en la sesión solemne de apertura de la legislatura. Se giró para abandonar la Cámara y entonces se oyó: «¡Viva el rey!», un grito que fue respondido por buena parte de los diputados y senadores apelotonados en el hemiciclo. El rey se giró entonces y saludó de nuevo a modo de agradecimiento.
Ese grito espontáneo, que surgió «en décimas de segundo» lo lanzó Tristana Moraleja, diputada del PP por la provincia de A Coruña, un cargo que combina con su acta de concejala en el Ayuntamiento de Oleiros. «No fue preparado, salió así, sin pensar», explica Moralejo, quien encuentra explicación a su grito en los momentos previos a la sesión, e incluso a la jornada de investidura de Pedro Sánchez. «Por un lado estaba el discurso integrador del rey, unas palabras inclusivas a todos, de integración -relata la diputada-, y por otro lado, estaba siendo una jornada bochornosa porque veíamos que, ya sin citar a los que se habían quedado fuera negando la existencia del rey, otros que estaban dentro se mostraron inmunes a sus palabras, y algunos, ocupando incluso un lugar en la mesa grande del Congreso». El ataque de Tristana Moraleja se centra principalmente en varios diputados de Podemos. «Hemos pasado unas semanas teniendo que tragar con discursos muy duros de la portavoz de Bildu, o miembros de ERC que dicen que la legislatura no les importa», explica. «Creo que por eso me salió así, por ese cúmulo de circunstancias, al que hay que sumar que la propia presidenta del Congreso, Meritxell Batet, no deslizó un ‘Viva España’ en ningún momento al final de sus intervenciones. Me salió así, grité ¡Viva el rey! y el hemiciclo respondió», indica la diputada, quien minutos después de esa escena se sumó al besamanos en el que también saludó a la infanta Leonor, además de a los reyes.