La ORA y las cámaras contra la doble fila vuelven a funcionar hoy

Xosé Vázquez Gago
Xosé Gago A CORUÑA

A CORUÑA

Eduardo Pérez

El gobierno local reactiva la vigilancia por el aumento del tráfico

18 may 2020 . Actualizado a las 09:41 h.

El Ayuntamiento reactivará hoy la ORA y las cámaras de vigilancia contra la doble fila, confirmaron fuentes municipales. La decisión del gobierno local tiene el objetivo de reforzar el control del tráfico en la ciudad, ya que se ha detectado un importante aumento de la circulación desde el arranque de esta semana, cuando se puso en marcha la primera fase del plan de desescalada tras ralentizarse el avance de la pandemia del coronavirus.

Tanto el aparcamiento regulado como las cámaras dejaron de funcionar a mediados de marzo, cuando el Ejecutivo declaró el estado de alarma y ordenó el confinamiento de la población para reducir el número de contagios.

Tras la interrupción del servicio, la empresa que gestiona la ORA, Setex Aparki, puso en marcha una regulación de empleo mientras se mantuviese esa medida. El ERTE se aplicó a pesar de un informe negativo del Ayuntamiento, que se había comprometido además a mantener la liquidez de las concesionarias, una medida que buscaba precisamente evitar regulaciones de empleo.

Por otra parte, las cámaras 30 de vigilancia contra la doble fila, situadas en la ronda de Outeiro, San Andrés, Juan Flórez y el entorno de Médico Rodríguez, se reorientaron con el fin de controlar a los ciudadanos que incumplían la norma de confinamiento.

Esos dispositivos se habían instalado en el mandato 2011-2015 por el gobierno del PP. En principio iban a servir para custodiar los cruces semafóricos y las nuevas vías prioritarias vigiladas, pero el sistema nunca llegó a funcionar en su totalidad y los aparatos quedaron sin una finalidad clara durante todo el mandato anterior.

A finales del 2019, la alcaldesa, Inés Rey, anunció que recuperaría las cámaras con el fin de reforzar el control del tráfico. En concreto se centraron en perseguir la doble fila, una de las malas prácticas de conducción más extendidas y que más problemas provocan en la ciudad. Solo en los 20 primeros días de noviembre, las cámaras multaron a más de 4.200 conductores. Pero los efectos sobre el tráfico pronto se hicieron evidentes, y en febrero los vehículos mal estacionados en las principales vías se habían convertido en una excepción.

El estallido de la pandemia del coronavirus provocó tal caída del tráfico que la doble fila dejó de ser un problema. Pero el pasado lunes, con el aumento de la circulación, esa y otras malas prácticas de aparcamiento volvieron a las calles de la ciudad. Su regreso coincide con la puesta en marcha de varias medidas para ampliar los espacios públicos disponibles para los transeúntes, como las peatonalizaciones temporales de carriles en los Cantones, el entorno del estadio de Riazor o el paseo marítimo, o la imposición de limitaciones de velocidad de diez por hora en numerosas calles de los barrios.

Ese plan municipal, que ha sido destacado por Greenpeace, quedaría cojo si se volviesen a generalizar los estacionamientos irregulares de vehículos, de ahí que el Ayuntamiento haya decidido recuperar los controles levantados durante la pandemia.