Transportes justifica el retraso del proyecto para garantizar los suministros
29 ago 2021 . Actualizado a las 23:20 h.En septiembre del 2020, el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) anunciaba la adjudicación del contrato para el cruce del Sol y Mar. Comunicaba el proyecto esperado por los oleirenses desde hace casi dos décadas: «Las obras comenzarán antes de final de año». Eso sí, sin determinar fecha concreta. Este anuncio no se cumplió y acumulado al retraso de adjudicación de la obra (previsto para los meses de verano), se sumaban siete meses más en su comienzo. De ahí que este sea uno de los principales reproches que García Seoane emite contra el ministerio.
En mayo, el concello comenzaba los trabajos de renovación de la red de abastecimiento de agua en Perillo. Era un paso previo a las obras del Gobierno central en el Sol y Mar. Se realizaron en ambos márgenes de la AC-12. Para ello, fue necesario levantar (y tapiar posteriormente) el pavimento de las aceras. Según el alcalde, la duración de esta obra se redujo de los cuatro meses previstos a dos.
No obstante, se solaparon con la llegada de la obra de Transporte. Así, el 2 de junio comenzaba la fase 1 de las obras de la N-VI en Perillo. Y con ello, se cortaba un carril en cada sentido. Alrededor de 90.000 conductores del área metropolitana se veían obligados a buscar alternativas. El presupuesto de esta obra alcanza los 9,8 millones de euros y contempla la construcción de una glorieta elevada como intersección y un paso subterráneo para los carriles de la AC-12. Esta primera fase consistió en la demolición de la mediana de la calzada y en la reposición de diversos servicios afectados por las obras.
La segunda y actual fase llegaba el 12 de julio. Con ello, volvieron los cortes de tráfico, pasando de dos carriles a uno en la calzada sentido A Coruña (puntos kilométricos 4,920 y 5,620). Igualmente, se prohibió el cambio de sentido en el 5,750, frente a la jefatura de la Guardia Civil, debiendo realizarse en el enlace de O Graxal. Los usuarios tienen el acceso cortado a la calle Areal. Como solución, se habilitó un desvío a través de la vía As Garridas. Estas afecciones se solapan, asimismo, con las obras correspondientes a la primera fase, todavía en marcha, que implican la supresión del carril lento entre los kilómetros 4,840 y 5,060 en la calzada sentido Madrid para seguir trabajando en la sustitución del cableado de servicios.
La pregunta es, ¿qué está haciendo el Mitma actualmente? Si bien no concreta con precisión en qué punto de las obras se encuentra, las actuaciones relativas a la segunda fase consisten en la reposición de los servicios afectados en la margen izquierda de la carretera. Esto supone la reinstalación de la red de abastecimiento de agua y saneamiento, la vía separativa de pluviales e iluminación. También incluye la relocalización de las líneas eléctricas de media y baja tensión, las conducciones de diversos servicios de telefonía o las líneas de gas. Y con ello, se vuelve a levantar el pavimento que el Concello cerró en julio. Para García Seoane esta actuación es «unha neglixencia» por el dinero y el tiempo perdido.
Paralelamente, el Mitma explica que hasta el momento se ha realizado una campaña geotécnica y un protocolo de grietas, así como la ampliación del terraplén y la demolición del muro de fábrica del polígono A Xesteira.
¿Tres meses para cambiar los cables de los servicios? Efectivamente. Aunque se hayan llevado a cabo las actuaciones anteriormente citadas, las obras han dado prioridad a esta relocalización. Sin estas conexiones se podrían dar problemas en los servicios de luz, agua, telefonía o gas natural. Y teniendo en cuenta la duración estimada del proyecto, que es de unos 28 meses, primero se deben asegurar estos pasos previos, según el Mitma.
Cuando esta intervención finalice, comenzarán «los trabajos de ejecución de los muros de pantalla, su posterior excavación y la ejecución de las losas superior e inferior que compondrán el nuevo enlace», indican desde el ministerio. Así será el futuro inmediato de las obras del ya inexistente Sol y Mar.