La Crisálida se transforma en mariposa

Patricia García Lema
Patricia García A CORUÑA

A LA ÚLTIMA

P.G.

Ramón Santos cogió las riendas del mítico negocio de San Andrés el pasado mes de marzo

04 jul 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

«Siento que el nombre de La Crisálida no me pertenece. Va más allá del negocio, forma parte del acervo cultural de la ciudad», cuenta Ramón Santos desde el otro lado del mostrador de madera de esta mercería del 54 de San Andrés. Es un clásico de la ciudad, funciona desde 1942. Ramón, que lleva toda la vida dedicado a la costura, es el último al frente de este barco con más de 150.000 referencias. Antes de propietario, era cliente. Hace más de un año entró para hacer una compra, justo cuando estaba en el medio del proceso de traspaso del negocio, y el corazón le dio un golpecito: algo le decía que tenía que quedarse allí. «Tuve dudas y aún las tengo, pero creo que era lo que tenía que hacer». En marzo transformó La Crisálida en mariposa: abrió las cajas con miles de cintas, puntillas, lazos y dejó todo a la vista, creó un perfil en Instagram para hacer que esta mítica mercería conviviese en el mundo 3.0, y puso un banquito a la entrada, para que el que quiera pase un rato al sol. Dentro, filas de botones hasta el techo, muebles antiguos que guardan cremalleras y un aula, al fondo, donde se dan clases de costura.