El día 29 más de centenar y medio de pilotos saldrán de María Pita para un recorrido inédito de tres tramos a tres pasadas que da inicio al Campeonato Gallego
31 ene 2020 . Actualizado a las 08:53 h.Menos mal que el 2020 es año bisiesto. Porque el 29 de febrero será un día grande para el automovilismo gallego. Ese día arranca de verdad el Campeonato Gallego de ralis, con la disputa del de A Coruña, cita emblemática cuya presentación oficial en el parque cerrado de María Pita se celebrará la noche anterior.
Este año, además, el rali coruñés estrenará formato, acorde con la nueva reglamentación de la Federación Gallega de Automovilismo: tres tramos a tres pasadas. La escudería organizadora, One Seven Racing (con Álvaro Muñiz a la cabeza), da forma de este modo a una vieja propuesta suya para hacer más atractivo uno de los ralis más queridos del calendario autonómico.
De este modo, la acción se centrará en los ayuntamientos de Aranga, Cerceda, Culleredo y Arteixo. One Seven Racing ha conseguido introducir prometedoras novedades en un recorrido inédito, al tiempo que conserva determinados trechos que son los predilectos del público y los participantes, por su espectacularidad.
Del Palacio a María Pita
Los prolegómenos de la carrera propiamente dicha servirán de excelente aperitivo para que los coruñeses gocen de la presencia de los bólidos en las calles de la ciudad herculina.
El viernes 28 de febrero, desde las doce del mediodía hasta las cuatro y media de la tarde, la explanada del Palacio de los Deportes de Riazor acogerá las verificaciones técnicas y administrativas, lo que provocará el desfile de los coches de carreras más punteros que pueden competir en las carreteras gallegas.
Después de la burocracia, la caravana de bólidos se desplazará hasta la plaza de María Pita, en la que One Seven Racing inaugurará oficialmente la temporada 2020 en los ralis gallegos, por medio de un espectáculo de luz y sonido que aumentará las revoluciones de todos los presentes.
De nuevo, y a medida que se vayan presentando los equipos, el imponente elenco de participantes en el renovado rali de A Coruña, volverá a recorrer las calles de la ciudad hasta polígono de Vío, donde permanecerán las máquinas a la espera de la gran jornada del sábado.
Ponte Aranga
Aranga será el primer destino. Desde allí partirá el primer tramo cronometrado, cuya primera pasada se celebrará a las 8.28 horas. Punto ya icónico del rali coruñés es Ponte Aranga y la propia casa consistorial.
As Encrobas y la rotonda de Boedo
Tras el primer paso por Aranga, los equipos tendrán que enfrentarse al tramo de Cerceda, bordeando el lago de As Encrobas. Cada bucle se cerrará con el tramo de Culleredo-Arteixo. Un año más, la rotonda de Boedo protagonizará los momentos más intensos del rali.
Tras los tramos, la plaza de María Pita espera a los equipos alrededor de las nueve de la noche para celebrar la entrega de premios y el podio final sobre las diez menos cuarto de la noche.
ANÁLISIS DE LOS TRAMOS
Aranga
Se inicia en una zona muy estrecha y técnica, que servirá para poner a prueba desde el principio a todos los equipos. Tras estos primeros kilómetros, el tramo discurrirá por una zona rápida, en la que cualquier duda puede hacer perder valiosos segundos, que después serán complicados de recuperar en la zona final, una vez superada Ponte Aranga, donde el recorrido se estrecha nuevamente.
Cerceda
El tramo recorre casi la totalidad del perímetro del lago de As Encrobas, mezclando zonas muy rápidas y técnicas, en la que la confianza en las notas tomadas en los reconocimientos puede marcar la diferencia. El asfalto de esta especial es bastante liso, lo que puede convertirlo en muy deslizante en caso de encontrarse con humedades. Su zona final, con gravilla, puede marcar las diferencias a favor de los equipos que decidan arriesgar en ella.
Culleredo-Arteixo
La rotonda de Boedo volverá a ser el epicentro de la acción de este tramo, donde los miles de aficionados que se esperan en la zona podrán disfrutar de forma más que segura del paso en el sentido contrario a las agujas del reloj por la ya famosa rotonda de la localidad cullerdense. Se trata del tramo más corto del recorrido, por lo que los equipos tendrán que arriesgar antes de llegar a esta especial ya que no se esperan grandes diferencias en la pelea contra el cronómetro en este trecho.