Los bomberos y los empleados de la empresa de compostaje velan para que el fuego no se extienda
01 nov 2019 . Actualizado a las 18:52 h.El fuego que se declaró el miércoles en la planta de compostaje de la empresa Inversiones Castro Veira, en Figueiroa, Arteixo, continúa activo 48 después, aunque está controlado y, en un principio, no significa ninguna amenaza para otras empresas ubicadas en el entorno, ni para los montes próximos, y menos para el núcleo urbano de O Rañal.
Durante toda esta jornada, al igual que las precedentes, los bomberos del parque de Arteixo están visitando periódicamente, cada tres o cuatro horas, el área del fuego, una montaña de residuos forestales que abarca 2.100 metros cuadrados de extensión y llegó a tener 14 metros de altura.
La unidad contraincendios se encarga de refrescar y enfriar la zona: «No hay más alternativas. Tenemos que dejar quemar la masa forestal acumulada, porque el agua no llega hasta los focos de ignición», dijo Alejandro García, responsable de los bomberos de Arteixo.
En estas labores también participan los miembros de Protección Civil de Arteixo y la Guardia Civil, incluso con miembros del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona).