Una hostelera de A Coruña: «La gente nos llama al restaurante para saber si hay comida y si se mantiene la reserva»

A CORUÑA CIUDAD

El Día del Padre impulsa el sector de la restauración local, que comienza a tener problemas de abastecimiento
20 mar 2022 . Actualizado a las 23:34 h.La mañana soleada y las reuniones familiares para celebrar el Día del Padre hicieron que los coruñeses disfrutaran de esta jornada un tanto ajenos al precio de la energía, de los combustibles, de la guerra de Ucrania y de la huelga del transporte. En este día festivo, las terrazas de La Marina de A Coruña se llenaron por completo y prácticamente todos los restaurantes confirmaron que tenían las mesas llenas. «Durante la semana no se nota tanto, pero si el sábado y el domingo luce el sol, solemos tener todas las mesas reservadas», explicaba Pili Lado Soto, responsable de la cafetería y restaurante Noray. «Además, este viernes también estuvo la jornada muy animada gracias al Ralli de A Coruña, que atrae a muchísima gente durante todo el fin de semana». Explica que, si el buen tiempo se mantiene, la terraza estará llena hasta las nueve de la noche y el domingo esperan también una buena ocupación.

Aunque el Día de Padre es garantía de trabajo, el sector hostelero comienza a sufrir también los efectos del desabastecimiento. Inés Cabezas, responsable de la crepería La Petit Bretagne, confirmaba que todas las mesas están reservadas para este sábado pero, ante la huelga del transporte, algunos clientes los llamaron «para saber si había comida». «La gente está asustada y nos llama para confirmar si pueden mantener la reserva o la tienen que cancelar», indica. Lo cierto es que, por ahora, este restaurante no ha tenido que cambiar su menú, pero ya comienzan a tener problemas de abastecimiento de pescado, carne y harina, que es la base de su cocina. «Y todo, ¡todo!, está subiendo de precio. Una bolsa de patatas fritas que sirve de aperitivo de 500 gramos ahora cuesta 15 céntimos más, que es una barbaridad. Incluso el butano se ha encarecido», critica. Dice también que para mantener la carta tal cual la tienen han tenido que recurrir a los supermercados para abastecerse de algunos productos que los distribuidores no pueden servirles. «Por ahora estamos subsistiendo y tenemos recursos, pero no sabemos qué va a pasar a partir del lunes. Quizás entonces comencemos a tener problemas», adelantó.
