A Coruña se prepara para un viaje en el tiempo a través del que retrocederá nada menos que ochocientos años. El Kiosco Alfonso servirá para recrear la España de 1208, aquella suma de reinos e intereses en el que las ciudades empezaban a forjarse como núcleos de pujanza alternativos que luchaban por independizarse del dominio religioso o feudal. Fue en ese marco en el que Alfonso IX accedió a conceder a A Coruña su carta fuero de privilegios. Y ese escenario es el que se reconstruirá a través de más de un centenar de piezas y paneles explicativos que se han reunido bajo la dirección del comisario Fernando López Alsina.
La muestra se abrirá al público el martes y pretende aprovechar la presencia masiva de visitantes durante los meses del verano para revelar los secretos del origen de la ciudad a todos los que se acerquen por el Kiosco Alfonso. Más de un centenar de piezas cedidas por toda clase de museos e instituciones públicas, así como también por parte de fundaciones y coleccionistas privados.
La exposición, que será inaugurada el próximo martes, a partir de la una de la tarde, por los Reyes de España y el ministro de Cultura, César Antonio Molina, entre otras autoridades, se divide en cuatro secciones que sirven para ahondar en la estructura política, social y artística del siglo XIII.
Así, la primera de las secciones explica la situación de la monarquía castellana en 1188, fecha en la que asumió el trono Alfonso IX, con una atención especial a la figura de su padre, Fernando II, impulsor, entre otras acciones de la construcción del pórtico de la Gloria y de la concesión de los fueros de ciudades como Avilés y Benavente, cuyos originales también estarán presentes en la exposición coruñesa. En esa época, León, el feudo de Alfonso IX, está encajonado entre Castilla y Portugal, pero ello no impide el desarrollo hacia el sur, hasta conquistar prácticamente todo lo que hoy es Extremadura, en vísperas de la definitiva unión con la monarquía castellana, que bajo la dirección de Fernando III, conocido popularmente como el Santo, le dará un impulso definitivo a la Reconquista, alcanzado ya tierras andaluzas y liberando, entre otros lugares, Sevilla.
La muestra que albergará el Kiosco Alfonso refleja esa nueva sociedad emergente, dividida en tres niveles fundamentales: los que combaten, los que laboran y los que rezan. La exposición recorre en su tercera estación la expansión de las ciudades medievales. Según los estudiosos, Alfonso IX, que también fundó la Universidad de Salamanca, fue el primer gran municipalista, pues fue el impulsor de numerosos fueros para reforzar su poder y sus competencias. En esa línea de trabajo, concedió el fuero no solo a A Coruña y Oviedo, sino también a los siete puertos marítimos fluviales, entre el Deva y el Miño, para intentar neutralizar el señorío episcopal de Santiago de Compostela.
La última de las secciones de la muestra es la que recoge las expresiones intelectuales, artísticas y espirituales de la época, que ya empiezan a tener unos tintes claramente urbanos, desplazando así el poder de los centros monásticos del saber, hasta entonces hegemónicos.