El proceso legal por la herencia de Camilo José Cela empezó al poco de morir el gran escritor español, en enero del 2002, cuando se supo que el premio Nobel de Literatura le había dejado a su hijo como único legado la obra El cuadro rasgado de Joan Miró, que se la había donado en octubre de 1990.
Catedrático de Filosofía del Derecho de la Universidad de Baleares, Cela Conde es hijo del premio Nobel y de su primera mujer, Rosario Conde, con quien el escritor gallego rompió tras 43 años de matrimonio para casarse con Marina Castaño.
Al morir su padre, Cela Conde dijo que el testamento no le había dolido «en absoluto», pero también dejó claro que no le quedaba más remedio que litigar para defender los derechos de su hija Camila. Y así lo hizo y lo anunció en el mes de febrero del 2002.
Cuadro odiado
Como ha confesado en alguna ocasión, Cela Conde llegó a «odiar» el cuadro que le donó su padre y que lo tuvo envuelto en una sábana para no verlo porque simbolizaba los aspectos más dolorosos del divorcio del escritor y Rosario Conde. Por ese motivo, Cela Conde lo vendió en 1996 y asegura que está muy satisfecho de no tenerlo ya.