Los encargados de decidir qué libros van al Gaiás trabajan «sin fecha y algo retrasados»

La Voz

CULTURA

21 nov 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

Con independencia de cómo concluya el plan de racionalización del gasto al cual está siendo sometida, la Fundación Camilo José Cela, cuya deuda a 1 de enero equivalía a un 96,8% de sus ingresos anuales (casi medio millón), conservará su sede de Iria Flavia y los derechos de propiedad sobre sus bienes. Entonces, ¿qué gana la Xunta inyectándole los 509.360 euros que solo este año le ha concedido? Al margen de salvarla de la quiebra, sufragar parte de su plantilla y apoyar varias de las actividades formativas que ofrece, a cambio desplazará a Marina Castaño a un cargo honorífico sin competencias ni remuneración, se hará con la mayoría absoluta en el nuevo patronato, y por ende con el control de toda la estructura y, por último, se garantizará el permiso para, cedido en comodato por 62 años, trasladar parte del legado del nobel al complejo del compostelano monte Gaiás, donde lo exhibirá.

El grupo de expertos movilizados para determinar, por su valor cultural o para la investigación, qué fondos sí y cuáles no procede incluir en la mudanza aún trabaja en ello «sin fecha de conclusión y, la verdad, con algo de retraso, porque la labor es muy compleja», admiten fuentes próximas al conselleiro Roberto Varela. «En todo caso -abundan- no se dará ningún paso sin informar antes al Concello de Padrón, ni cumplir los compromisos adquiridos con este: dejar allí facsímiles de las obras más relevantes y digitalizar más».