La gran retrospectiva del artista catalán, que reunirá en el Reina Sofía más de 200 obras, protagonizará la nueva temporada de exposiciones
03 ene 2013 . Actualizado a las 07:00 h.Hace más de dos décadas que se apagó su histriónica existencia, pero aún es el dueño de la escena. Salvador Dalí (Figueres, 1904-1989) protagonizará la gran exposición del año en el Reina Sofía, una retrospectiva que exhibirá a partir de abril más de 200 piezas del artista catalán. La muestra, que actualmente se puede ver en el Centro Pompidou de París, incluye piezas que solo excepcionalmente abandonan sus lugares de residencia habituales, como La persistencia de la memoria (1931), del MoMA, o Construcción blanda con judías hervidas (Premonición de la Guerra Civil) (1936), del Museo de Arte de Filadelfia.
Reina Sofía
La «Metonimia» de Cristina Iglesias. La escultora Cristina Iglesias (San Sebastián, 1956) inaugurará el próximo febrero, también en el Reina Sofía, Metonimia, una retrospectiva que incluirá 50 piezas de la autora de las famosas (y controvertidas) puertas de bronce que se alzan en el umbral de la ampliación del Prado en el antiguo claustro de los Jerónimos.
El Prado
Redescubriendo a Juan Fernández, «el Labrador». El Museo del Prado sigue explotando el filón inagotable de sus fondos, un tesoro único en el planeta. Ahora le toca el turno a Juan Fernández, el Labrador, un pintor español de la primera mitad del siglo XVII que la pinacoteca quiere redescubrir. En marzo se inaugurará la exposición temporal en la que el museo mostrará al público una selección de obras de El Labrador procedentes de coleccionistas privados internacionales y los cinco bodegones que posee el Prado: el célebre florero adquirido en 1946 a un particular (y que los expertos creen que ya había formado parte en el siglo XVII de las colecciones reales) y otras cuatro naturalezas muertas que llegaron al museo en el 2006 con la incorporación de los fondos del ex tesorero del PP Rosendo Naseiro, que el BBVA adquirió por 26 millones de euros y donó en dación al Prado.
Thyssen
Del impresionismo al hiperrealismo. El tercer vértice del triángulo artístico madrileño, el Museo Thyssen-Bornemisza, se aferrará al impresionismo y al hiperrealismo, dos garantías de público, para vertebrar su temporada. En febrero llegará al museo Impresionismo y aire libre. De Corot a Van Gogh, que explorará este movimiento desde sus orígenes hasta la aparición de Cézanne. También ahondará el Thyssen en las raíces de otro género con tirón entre los visitantes en Hiperrealismo 1967-2012, una muestra que revisará desde las primeras expresiones en Estados Unidos hasta su posterior evolución en Europa.
Guggenheim
De Antoni Tàpies a «El arte en guerra». El Guggenheim de Bilbao tampoco levantará el pie del acelerador este año. Dos exposiciones centrarán su programación, que mantiene su tradicional apuesta por los grandes nombres del arte contemporáneo. En primavera se abrirá al público El arte en guerra. Francia 1938-1947, con obras de Picasso, Giacometti, Matisse, Chagall o Kandinsky. Ya en otoño se podrá ver en el emblemático edificio diseñado por Frank Gehry una completa retrospectiva (desde los años sesenta hasta el arranque el siglo XXI) de la obra del añorado Antoni Tàpies.