Un burgalés se cuela en la carrera al Óscar a los mejores efectos visuales, en una velada que verá otros cuatro españoles en liza
27 mar 2022 . Actualizado a las 09:54 h.Desde que apareció en el catálogo de Netflix el pasado diciembre El poder del perro ha sido la indiscutible favorita al Óscar. Solo la carismática CODA podría hacer frente esta noche en el teatro Dolby de Los Ángeles a la intensidad con que Jane Campion dirigió su aclamado wéstern. La plataforma web nunca ha estado tan cerca de la codiciada estatuilla a la mejor película. Y lleva tiempo porfiando: Roma parecía que sí, pero no; Martin Scorsese lo intentó a lo grande con El irlandés; y, el año pasado, Mank trató de encandilar a la Academia con una carta de amor al cine que no se tradujo en premios.
Aunque el gigante del streaming se topó con Apple TV+, un rival recién llegado que está dándolo todo por CODA, la ganadora de Sundance 2021 y cuyo triunfo en los premios del Sindicato de Actores ilumina sus opciones como gran alternativa.
Por detrás en las encuestas aparecen la entrañable Licorice Pizza, Belfast, West Side Story y Drive My Car, única nominada no rodada en inglés. Y aún más lejos, Dune, No mires arriba, El método Williams y El callejón de las almas perdidas. Este año, tras la decisión de la Academia de fijar en 10 el número de candidatas, los casi 10.000 votantes tienen más opciones que nunca.
El poder del perro figura en los primeros puestos de todas las listas de las mejores películas del 2021. Y su directora, Jane Campion, prácticamente ya tiene grabado su nombre en el trofeo. La realizadora hace historia al ser la primera mujer en ser nominada a la mejor dirección más de una vez, tras la candidatura por El piano en 1993, que no se impuso pero que sí fue merecedora de la Palma de Oro en Cannes. Siete mujeres fueron finalistas hasta ahora a la mejor dirección en las 94 ediciones de los premios más populares de Hollywood: Lina Wertmüller, Sofia Coppola, Kathryn Bigelow, Greta Gerwig, Chloé Zhao, Emerald Fennell y Jane Campion. Campion podría sumarse ahora como ganadora a Bigelow (En tierra hostil) y Zhao (Nomadland), la gran vencedora del año pasado, ya que sumó a la realización también el galardón a la mejor película.
El poder del perro —que acumula los Bafta de la Academia Británica al mejor largometraje y la realización, los Critics Choice Awards en las categorías de filme, dirección, fotografía y guion adaptado y los Globos de Oro al mejor drama y la dirección— podría procurar además el Óscar a su actor protagonista, Benedict Cumberbatch, sublime como un antipático vaquero en una trama que explora la masculinidad tóxica, la soledad y la homofobia. El tono, la intensidad y la contención de su reparto son las grandes bazas de este drama, con una ejecución tan perfecta que podría jugar en su contra y restarle votos.
Si hay una cinta que podría aprovecharse del exceso de negrura y dramatismo —condimentos que a veces se les indigestan a los académicos— de la favorita esa es CODA, la que muchos ven como el posible Green Book de esta temporada.
El filme, un remake de la cinta francesa La familia Bélier que Apple TV+ adquirió por 25 millones de dólares tras imponerse en Sundance, ganó en los premios de los sindicatos de productores, actores y guionistas. Un dato muy relevante en cuanto que muchos de sus votantes repiten aquí. Su reparto, mayoritariamente sordo, y su argumento, sobre una hija de padres sordos con talento para la música, rellena muchas de las casillas de diversidad que tanto gustan a los Óscar de esta década.
Las bazas patrias
A las bazas españolas conocidas de Penélope Cruz y Javier Bardem (como actriz y actor protagonistas), Alberto Iglesias (a la banda sonora original por Madres paralelas) y Alberto Mielgo (junto con Leo Sánchez, al mejor corto de animación por El limpiaparabrisas), hay que sumar de algún modo al joven burgalés Aitor Echeveste (26 años), que participó como compositor digital en dos de las películas de los estudios Marvel nominadas al Óscar de los efectos visuales: Shang-chi y la leyenda de los diez anillos y Spider-Man: No Way Home. Echeveste —que considera favorita a Dune— se encargó de realizar los planos de principio a fin, con la integración de entornos, personajes y animales completamente en 3D.
