Los Juegos Paralímpicos de Pekín terminaron ayer con una impresionante ceremonia de clausura. «Fueron los mejores Juegos Paralímpicos de todos los tiempos», aseguró el presidente del Comité Paralímpico, el canadiense Phil Craven, frente a los 91.000 espectadores que colmaron las gradas del Nido de Pájaro.
Pero los Juegos no solo fueron un éxito en el aspecto deportivo-organizativo. El presidente chino, Hu Jintao, aseguró que «el gobierno chino y el pueblo construirán sobre el éxito de los Paralímpicos de Pekín y llevarán adelante el espíritu humanitario en todos los sentidos para el bienestar de las personas discapacitadas en China», dijo Hu.
El mandatario prometió que trabajarán «junto a gobiernos y personas de otros países» para promover el deporte de minusválidos y su buen vivir.
Espíritu
En la ceremonia se entregó el Premio Whang Youn Dai, reservado a quienes mejor representan el espíritu de los Juegos, a la nadadora Natalie du Toit y al corredor panameño Said Gómez.
El medallero dictaminó una clara victoria de China, que hasta hace no muchos años prácticamente ni figuraba en el deporte paralímpico. Los locales ganaron con 89 medallas de oro, seguidos por Reino Unido y Estados Unidos. España finalizó en décima posición con un total de 58 metales, 15 de oro, 21 de plata y 22 de bronce.