José Antonio Camacho, técnico del Osasuna, señaló que el empate frente al Sevilla es «un resultado justo» conseguido ante «un equipo muy competitivo». «La igualada llega como consecuencia de que nuestro conjunto trabaja hasta el último momento. El año pasado hubiéramos perdido el partido», indicó. «Ha cambiado nuestra suerte... que ya era hora», añadió.
«El hecho de estar último es por algo, pero lo que está claro es que no es por falta de ganas. En otros partidos se ha tenido mala suerte y hoy (por ayer) nos ha sonreído», agregó.
Por su parte, Manolo Jiménez, reconoció que el Sevilla «no jugó bien» y que lo hizo al ritmo que le interesó a Osasuna. «Hemos tenido la oportunidad de matar el partido y no supimos finiquitarlo cuando lo teníamos de cara», aseguró.
El preparador sevillista también reconoció que el equipo generó muy pocas ocasiones. «Otras veces se ha ganado por uno a cero pero con oportunidades y, sin embargo, esta vez no ha sido así. Es una pena y da rabia, porque sin haber hecho un buen partido, teníamos la victoria en la mano y al final se nos ha escapado», concluyó.