Una plaza para la Liga de Campeones. Eso es lo que se jugarán a partir de las nueve de esta noche el Atlético de Madrid (que recibe al Almería, retransmitido por los canales de pago por visión) y el Villarreal (que visita al Mallorca, televisado por La Sexta). El equipo colchonero solo necesita un empate ante el Almería para asegurar el cuarto puesto y certificar su presencia en la Liga de Campeones por segundo año consecutivo.
A los de Abel les basta con un empate en la última jornada porque solo el Villarreal, con dos puntos de desventaja y con la diferencia particular de goles perdida con los rojiblancos, tiene opción de alcanzarlos en la cita final de esta temporada.
El Villarreal visita al Mallorca, que no se juega nada, y solo entraría en Champions si gana y el Atlético pierde. Un empate de ambos daría la plaza de Liga de Campeones a los atléticos y mantendría a los de Pellegrini en la UEFA, a la que optan también el Valencia y el Deportivo.
El Vicente Calderón se llenará para la cita más importante de la temporada, en la que, además, el uruguayo Diego Forlán puede asegurar el trofeo de máximo goleador de la Liga y la Bota de Oro. El delantero, que ha firmado 31 goles esta campaña, once de ellos en los últimos siete partidos, asumirá de nuevo la responsabilidad ofensiva del Atlético junto al argentino Agüero. Ambos formarán la pareja atacante.
Enfrente estará el Almería, que nunca ha ganado al Atlético de Madrid en sus tres enfrentamientos anteriores en Primera División y que afronta con tranquilidad el último partido de la temporada, sin más cosas en juego que la honra de poner un buen broche a esta campaña, en la que ya tiene asegurada la permanencia.
Bajas en el Villarreal
Por otra parte, Manuel Pellegrini, el técnico del Villarreal, tan solo dispone de diecisiete jugadores, entre los que se encuentran Santi Cazorla, recuperado de su lesión, pero que no jugará de salida, y el joven del filial Joan Oriol, sancionado para jugar con el filial, pero que puede actuar con el primer equipo.
Pellegrini opina que Cazorla no está quizá para disputar un partido completo, pero que lo ve muy recuperado y sin temor después de la lesión, por lo que no descarta que tenga opciones de jugar.
Con todos sus deberes hechos, el Mallorca solo aspira ante el Villarreal a cerrar el curso «de la mejor manera posible, es decir, con un triunfo», según ha declarado su entrenador, Gregorio Manzano, que ahora suena para el banquillo del cuadro levantino ante la posible marcha de Pellegrini al Real Madrid.
El Mallorca ha sido uno de los mejores equipos en la segunda vuelta de la Liga.