El título de la Copa Davis en el Palau Sant Jordi, para completar los cuatro triunfos desde el 2000, premia la fabulosa cosecha de tenistas españoles de los últimos años. El triunfo apabullante por 5-0 sobre la República Checa en la final plasma el dominio que, desde hace tiempo, ejercen los españoles en el circuito mundial. Rafa Nadal, número uno del ránking hasta hace unos meses, fabuloso sobre cualquier superficie, ganador de todos los grandes menos el US Open, lidera la evolución en el tenis nacional, con jugadores como Fernando Verdasco, capaces también de competir en pista rápida y de plantar cara a los mejores. Y con otros dos ex números uno todavía en activo, como Carlos Moyá, que pasó casi toda la temporada en blanco por una lesión de cadera y ahora reaparece, y Juan Carlos Ferrero, renacido esta temporada tras meses de problemas.
El tenis español cuenta con figuras como vértice de una pirámide llena de jugadores. Después de Nadal, que derribó este año el último muro que le faltaba al tenis español al vencer en el Open de Australia, aparecen más y más nombres.
Hasta once tenistas nacionales lucen en la lista de los cien primeros de la clasificación mundial. España cuenta con ocho jugadores en el top-50, más que ningún otro país. Tras Nadal (2) y Verdasco (9), aparecen Tommy Robredo (16), David Ferrer (18), Nicolás Almagro (26), Albert Montañés (31), Guillermo García-López (41), Feliciano López (47)...
Entre los cien primeros de la ATP escasean, además, los jugadores de potencias históricas como Australia, que tan solo tiene a Lleyton Hewitt (22) y Peter Luczak (77). Entre los británicos, después de Andy Murray (4), solo se encuentra a Alex Bogdanovic (165). Y Estados Unidos solo cuenta con cuatro raquetas entre las cincuenta mejores: Andy Roddick (7), Sam Querrey (25), John Isner (34) y James Blake (44).
En las cuatro últimas temporadas los jugadores españoles lideran la clasificación por países de los torneos ganados en el circuito. Este curso cayeron trece títulos, frente a los seis de Rusia, la segunda nacionalidad por torneos ganados. A los cinco títulos de Nadal se unieron dos de Montañés y Robredo, y uno de Almagro, García-López y Verdasco. De forma parecida sucedió en el 2008, 2007 y 2006.
«Parece una rutina, pero ganar la Davis es algo espectacular. Ya llegarán las vacas flacas, por eso hay que disfrutar este momento», advierte el capitán, Albert Costa.