Fernando Alonso espera confirmar este fin de semana en Valencia las mejoras incorporadas en su monoplaza
25 jun 2010 . Actualizado a las 02:00 h.Llega Valencia en el ecuador del calendario y los anteojos de la fórmula 1 se dirigen a Ferrari. El segundo gran premio en España ha cambiado su ubicación -del sofocante agosto al llevadero junio- y en este punto del Mundial se espera el plan de choque de la escudería italiana. Es el coche versión 2.0, el que integra el mayor número de modificaciones y avances a lo largo del año, el que tiene que otorgar esperanza a Fernando Alonso, solo desplazado quince puntos del liderato.
Llega Valencia y el pasado e insulso jueves se transforma en un ejercicio de márketing. Es el sello de la fórmula 1, una plataforma extraordinaria para la difusión de su propio producto. A media mañana de ayer, Felipe Massa se presentó en un centro comercial y jugueteó con un simulador de Ferrari para deleite de los aficionados, que empujan con él en cada curva.
En la acera de enfrente, Pedro Martínez de la Rosa ofrece la enésima rueda de prensa mientras firma autógrafos a los aficionados en los grandes almacenes que lo patrocinan (El Corte Inglés), mientras hace público el acuerdo con Burger King para lucir su logotipo en la carrera levantina.
Más allá, Jenson Button se ofrece al público en un sarao que ha montado Vodafone, al tiempo que la prensa tiene la oportunidad de acercarse al vigente campeón del mundo de fórmula 1. Y en la zona noble del circuito valenciano, en una de las salas vip de la dársena de la Copa América, la macroconvocatoria: Fernando Alonso hace entrega de las becas que patrocina el Santander a estudiantes de media España, en presencia del presidente de la entidad, Emilio Botín. Actividad publicitaria en el puerto de la capital del Turia, luz y taquígrafos para el señuelo comercial, y toda la opacidad posible para el meollo de la cuestión deportiva. ¿Cuáles son las mejoras del coche de Ferrari?
Preguntas sin respuesta
Nadie responde a la cuestión. Ni en el campamento de la escudería italiana, ni en la conferencia de prensa que Fernando Alonso ofrece junto a Alguersuari, De la Rosa, Liuzzi y Petrov. «Nosotros mejoramos en todas las carreras -contesta el asturiano-. Sabemos que hay una gran expectación respecto a lo que podamos ofrecer y somos optimistas. Se ha realizado un gran trabajo en la fábrica y esperamos un claro paso adelante. ¿De cuánto? No sabemos», aseguró el piloto español. Todos los equipos presentamos evoluciones en Valencia y esperemos que las nuestras sean superiores a las de los demás».
Plan de choque
Ferrari ha puesto en marcha sus mejoras con el objetivo de conseguir el mayor agarre del F10 al asfalto. El coche corre en las rectas como el que más, entre otras cosas por el conducto F -el orifico que los pilotos accionan o tapan en función de si circulan en línea o en curva-, pero no tanto en los giros.
La semana pasada, Ferrari rodó un anuncio en su circuito privado de Fiorano y aprovechó para experimentar los cambios del coche (los entrenamientos privados están prohibidos y por eso el asunto se despachó de tema publicitario): nuevo doble difusor, retoque en las suspensiones, cambio de ubicación de los tubos de escapes, inclinación del motor, el diseño Adrian Newey, que fue el precursor este año. McLaren introduce novedades continuas y evoluciona en cada carrera. Ferrari ha preparado su desembarco en este gran premio, ha sacado toda la artillería al hilo de las ideas de sus ingenieros y de lo que han copiado de los demás.
Las primeras sensaciones de Alonso tras las pruebas en Fiorano son positivas. «En esas vueltas que dimos al circuito, tuve un buen feeling. Lo que necesitamos es confirmar que el desarrollo que vimos en Canadá funciona. Durante el fin de semana veremos si la respuesta también es positiva. Hay que tener en cuenta que en las tres próximas carreras en Silverstone, Alemania y Hungría no vamos a introducir novedades», concluyó el piloto asturiano.