Rabuñal se metió en la escapada buena y fue uno de los protagonistas del día
06 sep 2010 . Actualizado a las 02:00 h.David López lloró en la salida y en la meta. Primero, por la muerte de Chema González, masajista del Sky. después, por su primer triunfo en una grande. Se impuso en Alcoy. Fue el vencedor de una fuga de quince corredores, poblada con abundantes nombres ilustres, como Kreuziger, Barredo, Egoi Martínez y Moncoutie. Una aventura en la que también navegó Gonzalo Rabuñal, porque el Xacobeo lanzó de nuevo sus redes a las aguas de la Vuelta a España. Esta vez la gloria fue para López, que a unos cinco kilómetros de meta, al segundo intento, logró irse en solitario hacia la victoria.
En la escapada, el ciclista arteixán enseñó pronto sus cartas. A poco menos de sesenta kilómetros de meta, en el alto de Tudóns, logró unos metros sobre sus rivales. Y se lanzó al descenso para abrir brecha. Rabuñal es buen bajador. Pronto logró dos minutos de ventaja. Se abría la esperanza de un posible triunfo. Quedaban todavía tres puertos, tres altos de una etapa con perfil ciclotímico y tramposo. Pero esa posibilidad solo se mantendría si atrás se perpetuaba el desconcierto. Si no nacía una alianza común para alcanzar al ciclista disidente. Y hubo acuerdo. Se organizó la persecución. Rabuñal fue alcanzado y, tras su esfuerzo, era improbable que guardara arrestos para luchar por el triunfo. Después llegó la batalla definitiva, en la que participaron Caruso, Moncoutie, Kreuziger y Egoi Martínez, y en la que el más fuerte fue López.
Duelo por la montaña
Rabuñal protagonizó un singular duelo con Moncoutie, el ganador del sábado en Xorret de Catí. El francés quería arrebatarle el maillot de la montaña a Serafín Martínez, del Xacobeo. Rabuñal venció en cinco de las siete cimas puntuables de la jornada, pero no fue suficiente. El corredor del Cofidis encabeza, una vez más, la clasificación de la montaña de la Vuelta.
En la general no hubo grandes sobresaltos. Los favoritos entraron juntos a siete minutos del vencedor. Igor Antón mantiene su maillot rojo de líder. Purito Rodríguez se lanzó para dar tiempo al grupo de gallos, en el que se encontraba el teense Ezequiel Mosquera y en el que no perdía comba el vasco Antón. Lograron diez segundos de diferencia sobre Carlos Sastre y trece con respecto a Denis Menchov. Mosquera ocupa la séptima plaza de la clasificación.
Jornada de descanso
Hoy todos disfrutarán de la primera jornada de descanso de la carrera. Algunos de forma distinta. El italiano Alessandro Petacchi, que ganó la etapa de Orihuela, reposará en casa, ya que se retiró ayer de la prueba. Luis León Sánchez lo hará con sus compañeros del Caisse d?Epargne, pero ya como corredor oficial del Rabobank, ya que el fichaje se anunció ayer. En el horizonte del recorrido asoman las cumbres de las etapas decisivas de la montaña. Un mundo. El que queda de Vuelta.