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Hungría, última cita antes del parón veraniego

Christian Hollmann BUDAPEST / DPA

DEPORTES

29 jul 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

La última cita antes de que el verano europeo paralice la fórmula 1 llega con un atractivo inusual: mientras el alemán Sebastian Vettel y Red Bull sienten la presión de recuperar la senda del triunfo, sus rivales se relamen ante el inesperado bajón del equipo austríaco. «Debemos atacar cada fin de semana, y esa es también la mentalidad de Seb, que no mira las posiciones», dijo el jefe de Red Bull, Christian Horner, de cara al Gran Premio de Hungría que se disputa este domingo. En ese escenario logró Fernando Alonso su primer triunfo en el Mundial.

Si tras el fracaso ante su público en Nürburgring, Vettel gana en el Hungaroring, las frágiles esperanzas de sus competidores de volver a entrar de lleno en la lucha por el título se romperán. El séptimo triunfo de la temporada le permitiría a Vettel irse feliz de vacaciones.

Pero el alemán, de 24 años, no siente que nada sea seguro. «Debemos trabajar más duro en nuestro coche para volver al podio y quizá al escalón más alto», admitió. Mientras Vettel aprieta los dientes, el británico Lewis Hamilton, ganador el domingo pasado en Alemania, quiere aprovechar el impulso. «No se puede esperar que Red Bull sea siempre perfecto. En Alemania aprovechamos sus debilidades, ojalá haya más posibilidades», indicó el piloto de McLaren. Hamilton está tercero en el campeonato, a 82 puntos de los 216 de Vettel y a solo cinco del segundo, Mark Webber. «Espero poder quitarle un par de puntos a Sebastian y reducir su ventaja al frente del campeonato», dijo el australiano.

El tercer integrante del grupo de hombres que quiere hacerle la vida difícil a Vettel es Alonso. «Tenemos más argumentos que en las primeras carreras, pero aún debemos dar un paso más», dijo el español.