Un gol de Jonathan Pereira lanza al Villarreal en su camino hacia Primera

barcelona / efe

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Ahora recibirá en el Madrigal a su único rival en la pelea por la segunda plaza, el Almería

03 jun 2013 . Actualizado a las 11:28 h.

El Villarreal debía salvar el escollo del Barça B para solo depender de sí mismo en la última jornada y cumplió con creces, al aplastar (0-3) a un filial que empezó amenazante, pero acabó sometido por el rodillo de un equipo llevado en volandas por el masivo apoyo que tuvo en las gradas.

La marea amarilla que inundó Barcelona a bordo de 170 autocares fletados para la ocasión hizo que el Miniestadi, que vivía el último partido de la temporada, se transformara en un Minimadrigal. Un escenario a rebosar y teñido de amarillo gracias a los cerca de diez mil seguidores castellonenses que auparon a su equipo al cántico del «Sí se puede».

Comenzó el partido con un intercambio de golpes, que finalizó cuando apenas faltaba un minuto para el descanso, la locura de la afición visitante se desató al rematar el vigués Jonathan Pereira al fondo de la red un centro de Musacchio. Un golpe del que no se despertó ya el Barça B, que volvió de vestuarios completamente noqueado.

A partir de ahí, el Villarreal fue un vendaval. Marcó dos goles más y pudieron ser otros tantos. Con este resultado el conjunto amarillo depende de sí mismo para conseguir el ascenso directo a Primera. Recibe en el Madrigal a su único rival en la pelea por la segunda plaza, el Almería donde Charles sigue brillando.