La Vigo Cup llegó ayer a su fin con éxito absoluto para los equipos locales, que se impusieron en la mayoría de las finales. Cabe destacar los grandes resultados del Celta, que se alzó con la victoria en tres categorías -sub-10, sub-12 y sub-16-, así como el meritorio octavo título consecutivo logrado por el Olivo en el apartado femenino.
Las chicas del Olivo tuvieron que decidir en los penaltis su compromiso ante el Sárdoma, un partido muy exigente físicamente y que concluyó el tiempo reglamentario con empate a uno en el marcador. Anair Lomba fue la encargada de lanzar al fondo de la red el penalti que daba al conjunto vigués su octava corona seguida en este campeonato.
También tuvo que dilucidar en la lotería de los penaltis el Celta su partido definitivo en la categoría sub-16, en el que el Clínica Sanas -un combinado formado por jugadores de Pereiró y Val Miñor- les plantó cara, terminando los minutos reglamentarios con igualada a dos tantos. Las penas máximas desequilibraron la balanza a favor de los célticos, que se impusieron por 5-4.
Mucho más holgadas fueron las otras dos victorias cosechadas por el Celta, ambas por un abultado resultado de 9-0. La víctima en el caso de la categoría sub-10 fue Los Sauces, mientras que en la sub-12 le endosaron la goleada a un Coruxo que, sin embargo, no dejó de intentar maquillar el resultado hasta el último suspiro.
En la categoría sub-7, el premio se lo llevó en esta ocasión el Victoria, que, tras no pasar del empate a dos durante su choque ante el Lérez, solo logró vencer a los pontevedreses en los lanzamientos desde el punto de penalti, donde la suerte estuvo de su parte (3-2).
El Areosa se proclamó vencedor en el apartado de sub-8, donde mostró su solvencia (6-3) ante un Coruxo que sumaba así dos subcampeonatos en la Vigo Cup de este 2013, quedándose a las puertas del título, igual que le había ocurrido en la sub-12.
Y si el Areosa se llevaba el gato al agua en el torneo de menores de ocho años, no pudo hacer lo propio en la otra final que había alcanzado, la de sub-14. En ese partido, la victoria fue para el Santa Mariña, que venció por 2-1. Era el segundo año consecutivo que el conjunto caía en la final de esta categoría de la Vigo Cup.