Cabrera-Bello y Miguel Ángel Jiménez, en la zona noble tras la primera jornada
19 jul 2013 . Actualizado a las 07:00 h.Los españoles Rafael Cabrera-Bello y Miguel Ángel Jiménez debutaron ayer con mucha fuerza en el Abierto Británico , en una jornada en la que dos de los favoritos, Rory McIlroy y Justin Rose, dijeron prácticamente adiós a sus opciones de victoria. Por su parte, el norteamericano Zach Johnson finalizó la jornada como líder con una tarjeta inmaculada de 66 goles, cinco bajo par. Completó los 18 hoyos del legendario Muirfield con un golpe menos que Cabrera-Bello, de 29 años y un ganador en su época de juvenil.
«Hace sol y eso es bueno para alguien que viene de las Islas Canarias», dijo Cabrera-Bello. «Disfruté cada segundo de este día», añadió el español, feliz de que Jiménez esté a solo un golpe de él. «Está bien ver a Miguel ahí porque tuvo una gran influencia en mí y porque siempre ayudó a los jóvenes en el Tour», agregó. Jiménez terminó la jornada a un golpe de su compatriota después de lograr tres birdies en los tres primeros hoyos de la jornada. «Empecé muy bien con tres birdies consecutivos y otro en el quinto, después un buen par», dijo Jiménez, conocido por fumar puros durante las competiciones.
Un despliegue sólido
«Jugué sólido», añadió el español, que llegó a estar cinco bajo el par. «Los greens son muy rápidos, el tiempo está bien, la pelota está botando de forma limpia, no nos podemos quejar». «Me sentí muy cómodo y estoy muy feliz con mi actuación», concluyó el español de 49 años.
El número dos del ránking mundial, el norirlandés McIlroy, y el inglés Rose, actual ganador del US Open, tuvieron una jornada complicada desde el inicio. McIlroy, que estaba con cuatro golpes sobre par en el hoyo 13, terminó a 13 golpes del líder, ocho sobre par. Su bache de juego es alarmante y ya no parece estar vinculado con el cambio de patrocinador como se llegó a especular en un principio. En cuanto a Rose también podría quedar fuera del corte después de completar la jornada con una tarjeta de 75. «Fallé demasiados golpes. Cometí muchos estúpidos errores mentales», dijo McIlroy.
La cara fue para Phil Mickelson, flamante campeón del Abierto de Escocia el pasado fin de semana, se lució con una ronda de 69 golpes, dos bajo par., y está listo para aspirar al penúltimo major de la temporada. El defensor del título, Ernie Els, tuvo que conformarse con 73 golpes tras un triple bogey en el hoyo 17.
El número uno del ránking Tiger Woods tampoco quedó mal colocado después de la primera jornada en la que firmó una tarjeta de dos golpes bajo par, idéntica a la de Mickelson y del argentino Ángel Cabrera, quien contribuyó a que en la cabeza del British se escuchase español. Sergio García, por el contrario, naufragó en el campo escocés. Hizo un recorrido de cuatro golpes (75) sobre el par.