
Fundado en 1953, el equipo de fútbol acaba de subir a Tercera, el mayor logro de su historia. El máximo responsable de su directiva hace balance
31 may 2015 . Actualizado a las 10:01 h.Javier García Dieste (Mugardos, 1958), informático del Sergas en el Marcide, lleva semanas encantado porque su club, el Galicia, acaba de romper su techo al subir a Tercera. «Ha sido una alegría muy grande, la recompensa al trabajo de toda la gente del club desde su fundación, directiva, socios... Subimos con un presupuesto pequeño -150.000 euros para todo, con 12 equipos- y un esfuerzo muy grande, al ser un referente en la ría, porque creamos un ambiente agradable, donde los jugadores están a gusto. Tenemos un vestuario muy bien avenido. Poco les ofrecemos en cuanto a ayudas económicas, poco más que para sus gastos».
-Piensan competir en Tercera.
-Sí, ahora tendremos una asamblea, la directiva expondrá la situación y como pensamos realizar la temporada en Tercera. Llamaremos a los patrocinadores para ver si con más ayuda podemos afrontar la liga de una forma modesta. El equipo es bastante joven, se formó hace tres años prácticamente. Cuando entré en la directiva se hizo un bloque nuevo con el fichaje de Stili como entrenador, que realiza un gran trabajo. Pasamos de estar en peligro de descenso a este éxito, poco a poco mejorando. Ahora llegamos a tocar el cielo, algo histórico para Mugardos con el apoyo de toda la población. Somos un club que reúne bastante gente en el campo. Mil personas vieron el penúltimo partido en casa, 200 viajaron a Lugo... Ese apoyo nos da fuerzas para trabajar y a los jugadores para poner su granito de arena, que hacen una montaña muy grande, de piedras.
-¿Qué les hace diferentes?
-Nuestro talante todos estos años. No es que yo esté en la presidencia y cambiase todo. Tenemos gente muy colaboradora desde hace tiempo. Eso nos lleva a seguir adelante. Tener tantos niños en categorías inferiores es un orgullo. Son 120 en un pueblo de 4.500 habitantes y baja natalidad. Hacemos el trofeo Concello de Mugardos en Semana Santa para prebenjamines, benjamines y alevines, y llevamos tres años con 500 niños participando. Para eso estamos 30 o 40 personas de forma voluntaria haciéndolo posible. A lo mejor el Galicia es más que un club, como el Barcelona (ríe) por la aportación de tantos. También está el Club do Mar haciendo una labor muy buena. No cobramos a los padres de los niños, solo pedimos que colaboren con nosotros y que, si pueden, se hagan socios, y les damos la ropa y todo.
-El Galicia es el filial del Racing. ¿Crecerá la colaboración ahora en Tercera?
-Nos tendremos que sentar. Tenemos una colaboración estrecha, ya nos cedían jugadores, y puede ser mejor. En Tercera podemos ser un gran apoyo para el Racing con jugadores que puedan ir de un equipo a otro.
-¿Cómo llegó a la presidencia?
-La mayoría de los directivos actuales ya estuvimos en la junta de [Xosé Antón] Bouza. No vengo del mundo del fútbol, sino que hice remo y cuando mi hijo se unió al Galicia me comprometí a echar una mano. El club no podía estar sin cabeza, y la gente hace la labor cómoda. La maquinaria funciona sin tocar demasiado.
-Si el Somozas está en Segunda B el Mugardos... Siga la frase.
-(Ríe). Es muy difícil. El Galicia es un club pequeño, los ingresos tampoco son muy grandes. Según el presupuesto que tengas, puedes llegar a una categoría. El Galicia estaba ya bien asentado en Preferente. Ahora damos el salto a Tercera... Nunca se sabe. Antes éramos más equipo de Primera Autonómica y luego nos afianzamos en Preferente y ahora damos el salto. No sé el tiempo que estaremos ahí. Tenemos un equipo bueno que puede mantenerse más con algún refuerzo. Antes Preferente nos parecía una utopía, y ahora estamos picando un poco más alto. El objetivo siempre está ahí, ir hacia arriba, pero con los pies en el suelo sin hipotecar el club.
Javier Dieste, en el campo de A Pedreira, donde juega el equipo mugardés