Inglaterra se lo cree, otra vez

Xurxo Fernández Fernández
xurxo fernández REDACCIÓN / LA VOZ

DEPORTES

ANNEGRET HILSE / Efe

La remontada frente a Alemania resucita las esperanzas de los pross de ganar por fin una Eurocopa

28 mar 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

En ese país que vive a la contra, entre millas y grados Fahrenheit, no hay termómetro más fiable que el de las casas de apuestas. A los ingleses les obsesiona jugar con las probabilidades, casi tanto como ganar una Eurocopa. Los inventores del fútbol se llevaron el Mundial del que fueron anfitriones, en 1966, pero no lograron hacer lo mismo con el torneo continental que acogieron treinta años más tarde. Antes y después de aquello, los pross han sido varias veces candidatos a un título que ni siquiera han llegado a acariciar (aparte del 96, nunca han pasado de cuartos). Casi cada cuatro años, Inglaterra aparece como candidata a algo grande y acaba en fiasco, pero la moral británica es irreductible y este verano el trofeo vuelve a ponerse a tiro. La espectacular remontada ante Alemania en Berlín ha cargado de razones a quienes defienden que, tras medio siglo del único título serio que ha recalado en las islas, toca doblar la cuenta. Esta (otra) vez sí.

Resultados alentadores

Fase de clasificación inmaculada y victorias de enjundia. Después del gol de Dier en el descuento, el valor de la coronación inglesa en Francia cayó un par de puntos. Pasó del 11 a 1 al 9 a 1 en una tabla de favoritos que encabeza el anfitrión, justo por delante del último campeón del mundo. Ambos han sido víctimas de los pross en sus amistosos más recientes. Antes del 2-3 a Alemania, la selección de Roy Hodgson cerró el 2015 endosándole un 2-0 al combinado galo en un emotivo duelo en Wembley (arrancó con la Marsellesa en memoria de las víctimas de los atentados de París). Doble colofón -nada que empañe la derrota frente a España en noviembre- a una intachable fase de clasificación para la Euro.

Inglaterra venció sus diez duelos en el grupo E, concediendo solo tres goles en contra y anotando 31 a favor. Se deshizo sin problema de rivales como Suiza o Eslovenia.

Plantel interesante

Talento nacional al servicio de las revelaciones de la liga. Al tanto logrado por Dier le habían precedido los de Kane y Vardy, máximos goleadores de la Premier y estrellas de los dos equipos que luchan por el título de liga. Al Leicester, revelación del campeonato, le persigue un histórico que no levanta un trofeo importante desde hace 25 años. Ambos han desalojado de los puestos de privilegio a los clásicos contendientes, liderados por figuras foráneas, y han contribuido a conformar la base de la selección de Hodgson.

En el once que Inglaterra plantó frente Alemania, cuatro futbolistas pertenecían al Tottenham. Pochettino ha dado lustre a un grupo de chavales entre los que, además de Kane, destaca el talentoso Dele Alli, de solo 19 años.

Relevo generacional

Nuevos ídolos y alguna esperanza en Rooney. En la lista de convocados para el choque con Alemania y el de mañana contra Holanda, Jagielka (defensa del Everton) es el único jugador que supera los 30 años. La tradicional falta de resultados y regularidad de los pross parece abocarlos a un constante relevo generacional, aunque en esta ocasión (y no es la primera) hay irrupciones ilusionantes. Los ingleses están ya hechos a sufrir bajo palos y Stones no ha confirmado lo que insinuaba en el centro de la zaga, pero de centro del campo hacia adelante, los nuevos han hecho olvidar la fugacidad de Lambert o la dimisión de Rooney, a la espera de que esta última sea al menos revocable.

Un grupo asequible

Rusia, Gales y Eslovaquia, primeros adversarios. Acabado el duelo del sábado, Hodgson tuvo que salir a recordar que aquello no había sido más que un amistoso, pero a la hinchada no se le escapan las buenas perspectivas cuando empiece lo serio, con Rusia, Gales y Eslovaquia como rivales del grupo B. Xavi, que levantó la última Eurocopa, apuntó a los pross entre los favoritos en una entrevista en The Mirror. A la teoría se apuntó ayer Erikson, el técnico sueco que dirigió a Inglaterra en dos mundiales y una Euro, entre el 2001 y el 2006. No pasó de cuartos, pero nunca perdió la fe.