El Madrid busca la tercera Champions consecutiva ante el Liverpool, último equipo le tumbó en una final
26 may 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Ni ser la primera escuadra capaz revalidar el título de la Liga de Campeones ni haber llevado en las dos últimas décadas a sus vitrinas seis títulos merman la voracidad del campeón. El Real Madrid quiere más, le obliga su laureado palmarés y la reciente trayectoria de un plantel que está pergeñando gestas de un equipo de leyenda. En el Olímpico de Kiev tiene una oportunidad de agigantar su leyenda levantado por tercera vez consecutiva el trofeo más anhelado a nivel de clubes. Tratará de impedirlo el Liverpool, el último conjunto que fue capaz de tumbar al rey de Europa en una final de la máxima competición continental, gracias a un tanto de Alan Kennedy que segó los sueños de los Del Bosque, Camacho, Juanito, Santillana, Stielike, Cunningham y compañía.
Los reds, revitalizados por Jürgen Klopp y encomendados al tridente que conforman Firmino, Mané y Salah, vuelven a suscitar un temor reverencial y aspiran a devolver a Anfield una gloria que no saborean desde aquel vibrante pulso del 2005 en Estambul resuelto en la tanda de penaltis que convirtió a Rafa Benítez en un ídolo en la ciudad de los Beatles.
Duelo vibrante
Frente a frente, dos de los equipos que han hecho de la mística del balón una forma de vida. De la irreductibilidad del cuadro merengue al conmovedor sentimiento de hermandad que aflora cada vez que la hinchada red entona el «You’ll never walk alone», un hilo une a dos entidades que se saben deudoras de su poderosa historia y que están empecinadas en engrandecerla aún más: su inagotable sed de triunfo, con 12 finales de 15 ganadas por el Madrid y 5 de 7 por el Liverpool.
Zidane podría convertirse en el tercer técnico que suma un triplete, como Ancelotti y a Bob Paisley, aunque ni el italiano ni el británico lo lograron de modo consecutivo ni en sus tres primeras campañas como entrenador de máximo nivel. Diecisiete futbolistas del conjunto español saben ya lo que es ganar la Champions, con Cristiano Ronaldo y sus cuatro títulos a la cabeza. Solo Emre Can la incluye en su palmarés de entre la plantilla que dirige Klopp, y de refilón, puesto que apenas figuró en la convocatoria de uno de los partidos que disputó el Bayern de Múnich para conquistarla en el 2013.
El Madrid, que cuenta con todo el plantel en perfecto estado de revista. La principal duda radica en si repetirá el once que goleó el año pasado a la Juventus en Cardiff o cambiará a Benzema por Bale. La velocidad del galés sería una buena forma de amenazar a un Liverpool que juega sin cadenas, aunque el francés podría aportar su superior capacidad asociativa.
El sello de Klopp
El Liverpool tiene el sello de Klopp, que ya le dio una buena dentellada al Real Madrid en las semifinales de la Champions de la campaña 2012-2013 con el Borussia Dortmund. Morder lo más arriba posible para culminar de modo eléctrico: 40 goles descontando los seis de la fase de clasificación, el tercer registro más alto en la historia de la competición. Diez fueron de Salah, otros tantos de Firmino y nueve de Mané en medio de un trayecto en el que los reds dejaron en la cuneta a Oporto, City y Roma.
Recupera Klopp a Milner y Emre Can, aunque previsiblemente solo el primero estará en el once inicial. Máximo asistente de la Champions, con nueve pases de gol, es una de las piezas capitales del mediocampo que completarán Wijnaldum y Henderson. Una medular para surtir al tridente liderado por Salah a la vez que auxilia a una zaga menos endeble desde la llegada de Van Dijk, el defensa más caro de la historia, pero que sigue arrojando dudas especialmente en la figura de Lovren, como también en la portería, con el alemán Karius.