En la cantera del Madrid y en el Huesca jugaron varios de los supuestos implicados en la trama
28 may 2019 . Actualizado a las 18:33 h.El ourensano Borja Fernández se estrenó con el Real Madrid de Del Bosque en un partido de Copa en Fuerteventura el 10 de octubre del 2001. A aquel duelo con el Pájara Playas, saldado con 0-4, le siguieron otras dos citas coperas esa misma temporada. En Tarragona frente al Nástic y en Vallecas ante el Rayo, ya en cuartos de final. En todas coincidió sobre el césped con otro joven canterano blanco que había caído en gracia al futuro seleccionador. Raúl Bravo disputó catorce partidos con el primer equipo en el curso 2001-2002. Cuatro en Champions, empezando por una cita con el Lokomotiv en la que también participó Carlos Aranda quien ya había vestido de blanco en la máxima competición continental con Toshack durante la campaña anterior.
El díscolo delantero de infancia complicada y carácter temperamental abandonó Madrid poco después del partido en Rusia para empezar en Soria una gira por hasta trece equipos distintos, sin llegar a salir del país. En el 2013, por ejemplo, pasó medio año en Granada, donde coincidió con uno más de los presuntamente implicados en el caso de corrupción que ha sacudido el fútbol español. Íñigo López cumplía entonces su tercera temporada en Los Cármenes, de donde salió, como Aranda, ese mismo verano. El central recaló en Grecia antes de pasar por Vigo y Córdoba para asentarse un tiempo en Huesca a partir de junio del 2015.
El equipo del Alcoraz tenía entonces como vicepresidente a Agustín Lasaosa, quien se convirtió en responsable máximo del club en julio del 2016. En la plantilla figuraba Samu Sáiz, otro jugador con pasado en la cantera del Real Madrid que figura entre los detenidos en relación con la presunta trama de amaños.
Íñigo López, Samu Sáiz y Borja Fernández coincidieron dos veces sobre el césped. Los dos primeros representando al conjunto oscense y el gallego vistiendo en una ocasión la camiseta del Valladolid (0-1 en Zorrilla, jornada 28, 6 de marzo del 2016) y en otra la del Almería (0-0 en el estadio de los Juegos del Mediterráneo, jornada 29, 12 de marzo del 2017). Para entonces, Raúl Bravo militaba en el Aris griego y Aranda en El Palo, de Tercera División.