Los dos compañeros de Ineos entraron con casi 2 minutos de ventaja en el grupo de favoritos, en el que entraron todos los primeros de la general menos Yates y Urán
17 sep 2020 . Actualizado a las 17:58 h.El polaco Michal Kwiatkowski logró este jueves su primera victoria en el Tour de Francia, al llegar a la meta de la mano de su compañero de equipo ecuatoriano Richard Carapaz, mientras que el esloveno Primoz Roglic mantiene el maillot amarillo.
A sus 30 años, el excampeón del mundo entró abrazado a Carapaz, su compañero del Ineos, con quien había protagonizado una larga escapada.
Los dos ciclistas no se disputaron la victoria de etapa, lo que significó el segundo puesto de etapa del vigente campeón del Giro de Italia, que se ha quedado a punto de convertirse en el primer ecuatoriano en ganar en la ronda gala.
Los dos compañeros de Ineos entraron con casi 2 minutos de ventaja en el grupo de favoritos, en el que entraron todos los primeros de la general menos el británico Adam Yates y el colombiano Rigoberto Urán.
Tras esta última etapa de montaña y a falta de la definitiva contrarreloj del próximo sábado en La Planche des Belles Filles, Roglic tiene 57 segundos con su compatriota Tadej Pogacar y 1.27 sobre el colombiano Miguel Ángel López.
El australiano Richie Porte, que sufrió un pinchazo y estuvo a punto de ceder tiempo, acabó con los mejores y mantiene la cuarta plaza a 3.06, mientras que el español Mikel Landa, que atacó en el último puerto, ganó una plaza y está a 3.28, mientras que su compatriota Enric Mas es quinto a 4.19.
Yates cae a la séptima posición a 5.55 y Urán a la octava a 6.05, por delante del holandés Tom Dumoulin (7.24) y del español Alejandro Valverde (12.12).
Una jornada para los esprinters en medio de la montaña
El Tour abandona los Alpes y la entrada en el Jura de forma modesta, con una etapa de transición sin apenas dificultades montañosas que debe calmar los ánimos tras la alta montaña y guardar fuerzas para la contrarreloj definitiva del día siguiente en La Planche des Belles Filles.
La previsión es que los 166,5 kilómetros entre Bourg en Bresse y Champagnole acaben en una llegada masiva y constituyan la penúltima oportunidad de victoria para los esprinters antes de la tradicional en los Campos Elíseos del domingo.
El terreno es propicio para ello, sin apenas dificultades, un paseo turístico por rutas de viñedos en los que los equipos de los llegadores tendrán terreno favorable para controlar las escapadas.
Los pretendientes a la victoria final podrán relajarse de cara a la crono del último día, conde la clasificación general quedará definitivamente establecida.