Los blancos se medirán a Shakhtar, Inter y Borussia Monchengladbach; los azulgranas a Juve, Dinamo de Kiev y Ferencváros; los colchoneros a Bayern, Salzburgo y Lokomotiv; y el Sevilla, a Chelsea, Krasnodar y Rennes
01 oct 2020 . Actualizado a las 20:35 h.La Liga de Campeones está de vuelta. Tras la temporada más atípica de la historia, con una resolución exprés en formato de final a 8 en Lisboa después del parón provocado por la pandemia de la covid-19, los equipos españoles, que el pasado curso no alcanzaron las semifinales por primera vez en trece años, ya conocen su hoja de ruta en la fase de grupos. Con el habitual reparto de premios, pero a puerta cerrada y en Ginebra (Suiza), en consonancia con la realidad global actual, el sorteo se hizo esperar, pero acabó deparando una fortuna dispar para Real Madrid, Barcelona, Atlético y Sevilla, encargados de defender el honor del fútbol español entre la flor y nata del Viejo Continente.
El Real Madrid comenzó con buen pie, pues tuvo mayor fortuna al emparejarse en el grupo B con el Shakhtar Donetsk, del bombo 2, un buen equipo que alcanzó las semifinales de la última Europa League pero lejos de otros grandes nombres de este segundo escalón. El campeón de Ucrania, ante el que el Madrid logró sendas victorias en la fase de grupos de la temporada 2015-16, destaca por esa combinación de atacantes brasileños y defensores de la Europa del Este que le ha convertido en un clásico de las competiciones europeas en los últimos años. Sin embargo, toda la dosis de suerte inicial se torció al aparecer en escena el Inter de Milán de Antonio Conte. El rival más duro del tercer bombo no se mide a los blancos desde hace más de 20 años, en la fase de grupos de la campaña 1999-99, pero fue un oponente habitual de los de Chamartín en el siglo XX, con hasta 15 duelos, balance favorable a los transalpinos y una final entre ambos en 1964, que supuso el primero de los tres trofeos de los 'nerazzurri'. Completa el grupo el Borussia Monchengladbach alemán, probablemente el más duro del último bombo y un viejo conocido blanco, con una épica eliminatoria de cuartos de final de la Copa de Europa en 1976.
Mientras, el Barça se las verá en el grupo G con otro gigante europeo, la Juventus de Cristiano Ronaldo, en el primer cara a cara entre el portugués y su archienemigo, Lionel Messi, desde que dejó el Real Madrid hace dos temporadas. Se trata de un duelo habitual en la historia de las competiciones europeas, pues se ha producido en hasta 14 ocasiones, diez de ellas en la máxima competición continental, con un balance ligeramente favorable para el campeón italiano pero con el dulce recuerdo de la final de Berlín en 2015, que supuso la hasta ahora última corona azulgrana. Dos clásicos del Este, Dinamo de Kiev y Ferencváros húngaro, que regresa a la Champions un cuarto de siglo después, parecen rivales asequibles para el cinco veces campeón de Europa.
El gran coco se lo llevó el Atlético de Madrid, que en el grupo A se medirá con el actual campeón, el Bayern de Múnich. Los bávaros son el equipo más en forma de Europa después de conquistar la 'orejona' con un inédito pleno de victorias. Será la tercera ocasión en la que los colchoneros se crucen con el gran dominador del fútbol alemán en los últimos tiempos, tras las semifinales de la campaña 2015-16, de gran recuerdo para los de Simeone, que dejaron en el camino al entonces equipo de Guardiola, y la fase de grupos de la temporada siguiente, que deparó sendos triunfos por 1-0 para cada equipo como local. Más atrás en el tiempo queda la primera y durante muchos años única cita entre Atlético y Bayern, aquella final de la Copa de Europa del 74 que se resolvió con goleada germana en el partido de desempate después de la igualada agónica de los Maier, Beckenbauer, Müller y compañía cuando el duelo agonizaba con ventaja atlética. Les acompañarán en el grupo el Salzburgo austriaco, que nunca se ha enfrentado al Atlético, y el Lokomotiv de Moscú, rival de los rojiblancos la pasada temporada con dos victorias españolas.
Difícil para el Sevilla Finalmente, el Sevilla, que como el Madrid partía desde el bombo 1 como campeón de la Europa League, fue menos afortunado que los blancos con el bombo 2 y tendrá un hueso duro de roer en el grupo E con el Chelsea, muy reforzado en el segundo curso de Frank Lampard al frente de la nave blue, pues en Stamford Bridge han desembarcado jugadores como los alemanes Kai Havertz o Timo Werner, en dos de los grandes movimientos de un mercado a medio gas. Asimismo, los andaluces se medirán al Krasnodar ruso, procedente del bombo 3, un contendiente que debuta en Champions pero que ya conocen en Nervión, pues fue rival en la fase de grupos de la Europa League de hace dos temporadas, con victoria en el Pizjuán y derrota en tierras rusas. Cierra el grupo el Stade de Rennes francés, rival inédito para el Sevilla y tradicional vivero de jóvenes valores.
En esta ocasión, y más allá de los grupos de Real Madrid y Sevilla, el H se perfila como el más duro, con el actual subcampeón, París Saint-Germain; el Manchester United de Ole Gunnar Solskjaer, que quiere reverdecer viejos laureles en la Liga de Campeones; el RB Leipzig de Julian Nagelsmann, semifinalista el pasado curso; y el debutante Istanbul Basaksehir, que por ahora no podrá contar con su mayor fortaleza, el habitual entusiasmo de la afición turca. Los grandes de la Premier, el Liverpool y el Manchester City, se enfrentarán a Ajax, la revelación Atalanta y un nuevo, el Midtjylland danés, en el caso de los 'red', y a Oporto, Olympiacos y Olympique de Marsella los 'citizens'. Por último, el Borussia Dortmund parte como favorito en el grupo F, el a priori más igualado, con Zenit, Lazio y Brujas.