Miguel Martínez y Bea Gómez, las puntas gallegas en el Campeonato de España

DEPORTES

RAMON LEIRO

María Vilas renuncia al deporte de élite y se instala en Madrid

24 mar 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

La natación gallega arranca hoy en Sabadell a la carrera por una plaza europea que pueda abrir la puerta a los Juegos de Tokio. Miguel Martínez y Bea Gómez serán los embajadores autonómicos en este Campeonato de España Open de Primavera. El nadador vigués buscará el primer puesto para lograr el pase al Campeonato de Europa de mayo, mientras Bea Gómez, ahora en el equipo gijonés Santa Olaya, llega con menos opciones después de meses con una dolencia que no le ha permitido entrenar a su máximo nivel. Ya en Sabadell, donde se disputará la prueba, su entrenador, Pepín Ribera, reconocía ayer que «aunque confío en su talento, no llegamos con la preparación que buscábamos. Si todo va bien, intentaremos llegar al Europeo en mejores condiciones».

Esa lesión ha lastrado la preparación de Bea Gómez, que el pasado diciembre dio un giro a su trayectoria deportiva y sumida ya en la carrera hacia los Juegos dejó Pontevedra para fichar por el Santa Olaya. El objetivo es el mismo: lograr una plaza para Tokio. Para conseguir ese objetivo, la nadadora pontevedresa tiene que alcanzar la marca mínima exigida. Nadará en los 200 libres y 200 estilos con esa difícil meta. Y es que todavía quedan dos plazas por país para cumplir ese objetivo olímpico que Bea Gómez quiere reeditar. En diciembre del 2019 reconocía que necesitaba más tiempo para poder pelear por una plaza en Tokio.

La pandemia ha frenado esa proyección, pero le ha dado el tiempo que necesitaba. Junto a ella, estará Miguel Martínez, que a sus 20 años competirá en categoría absoluta en los 100 y 200 mariposa. «Su objetivo es quedar primero y lograr el pase al Europeo», señalaba ayer Luisa Domínguez, su entrenadora del CGTD, quien además reconoce que necesita «todavía mucho recorrido. Empezó a destacar tarde, en categoría júnior no se sabía de él. Y eso es favorable en su proyección». Los técnicos reconocieron a Miguel Martínez en el 2019 como el mejor nadador del año después de batir todos los récords gallegos de 200 mariposas y 200 y 400 estilos. «Es un nadador polivalente en varios estilos y no es rápido, pero tiene buen nivel en larga distancia», apunta Domínguez, que no se cierra puertas a la hora de fijar los objetivos más ambiciosos de Martínez.

Pero además de estas dos puntas de lanza de la natación gallega, estarán otros nadadores júnior que llegan con metas dispares. Paula Otero, Carla Carrión, Ana Cernadas y Rosalía Marín buscarán podio en el Campeonato de España, mientras Julia Rodríguez, Alicia Bouzas, Pablo Cabana y Carlos Souto intentarán rodarse en una prueba nacional. «Muchos de estos nadadores son júnior de primer año», apunta Luisa Domínguez, que desde hoy estará pendiente del Open de Primavera que se disputará en Sabadell hasta el próximo domingo.

María Vilas aparca la élite y retoma su vida en Madrid

María Vilas ha dejado el deporte de élite a un lado para retomar su vida laboral en Madrid. El confinamiento le llevó a replantearse sus ya difíciles aspiraciones de llegar a Tokio. Se había dado dos años de margen para pelear por una plaza en los Juegos con la selección de aguas abiertas, pero la pandemia le llevó a cambiar sus prioridades y decidió aparcar la primera línea del deporte para regresar a Madrid a trabajar. «Decidió retomar su vida y dejó a un lado la élite», explica su ex entrenadora en el CGTD, Luisa Domínguez. No es la primera vez que Vilas toma esta decisión. Hasta diciembre del 2015 creció como una nadadora prodigiosa y tras los Juegos de Río pagó con una depresión el esfuerzo de clasificarse. Volvió en el 2018 con el objetivo de llegar a Tokio 2020, pero no pudo ser. «Es una pena, pero es su decisión. Ella hizo un esfuerzo muy grande estos dos años», concluye Luisa Domínguez.