Creo que la pandemia ha pasado factura a nivel psicológico a todo el mundo. Todos somos humanos, todos fallamos. Nadie es perfecto, sin excepciones. Tampoco Simone Biles, que en la final por equipos solo ha hecho un aparato y no ha estado tan fina como acostumbra. Habrá que ver cómo se desarrollan los acontecimientos porque tiene este jueves la final del all around y era la favorita al oro. Pero este martes ha dejado de competir y aún le quedan cinco finales más.
En su caso, es mucha la presión que siente y que termina saliendo por algún lado. Cuando no te encuentras fuerte, o tan fuerte como siempre, puede ocurrir. Con Simone Biles me he encontrado en varios torneos y siempre la he visto fuerte haciendo gimnasia. Parecía que nunca iba a fallar, que siempre sería la mejor. La pandemia ha podido afectar, pero también puede que haya más cosas. En la final no ha estado al nivel que se esperaba, pero ha sido un año muy duro. Y ella lo ha sufrido como cualquier otra persona.
De un día para otro perdimos el objetivo de los Juegos Olímpicos. Pasamos de tener una estructura marcada, a de la noche a la mañana, no tener nada. No sabes si se van a celebrar los Juegos a pesar de que llevas cuatro años trabajando. Pierdes la motivación por la que entrenabas. Son pequeñas cosas, pero terminaron pasando factura.
No quiero mojarme sobre si seguirá compitiendo en Tokio, porque es ella la que sabe lo que está pasando por su cabeza. La única que puede decirlo es ella. Cuando los problemas vienen de la cabeza es muy complicado. No es tan fácil en gimnasia. No son molestias físicas, es un bloqueo mental y te puedes hacer mucho daño. En la gimnasia la cabeza juega un papel fundamental porque las lesiones pueden ser muy graves si fallas. Es ella la que decide, si no lo ve claro no saldrá a competir.
No creo que los problemas vengan porque el estadio esté vacío, todo lo contrario. He competido desafortunadamente en algunos y, aunque el ambiente es más frío, es una ventaja. Puedes escuchar mejor los consejos de tus compañeras y técnicos, y centrarte más en la competición, que siempre es importante.
Ana Pérez es cuatro veces campeona de España de gimnasia artística. Miembro del equipo nacional, no pudo acudir a Tokio por una lesión de gravedad