Arranca la temporada con capturas irregulares y con sensaciones contrapuestas
21 mar 2022 . Actualizado a las 19:19 h.«O mellor do primeiro día é confirmar que queda toda a tempada por diante», asegura un experimentado e ilusionado pescador gallego, uno de los miles que se han lanzado a las aguas continentales de la comunidad para inaugurar la temporada de pesca. Sin duda, acierta. En un escenario irregular en el que hubo zonas con capturas abundantes y otras en las que la suerte fue esquiva, el disfrute de la actividad deportiva y de la naturaleza es el principal reclamo del curso que ahora comienza y se extenderá hasta septiembre en el caso del reo y de la trucha.
Con carácter general, la temporada se prolongará hasta el 31 de julio y se podrá pescar todos los días, salvo los lunes que no coincidan con festivos autonómicos y nacionales y los jueves (en los que solo se permitirá la pesca sin muerte).
Lo cierto es que el día amaneció perfecto para pescar, con temperaturas agradables que invitaban a acudir en masa a los ríos. Los pájaros realizaban su actividad en la vegetación de ribera, todavía desnuda y con los brotes asomando.
OURENSE
Notable índice de capturas en unos ríos con poca agua
La temporada comenzó en la provincia de Ourense con buenos indicadores y con un satisfactorio balance en cuanto al número de capturas. Así lo confirmó el delegado provincial de la Federación Galega, Gabriel Fernández, que se pasó el día en el coto de Ribadavia: «Fue un buen día, sobre todo a primera hora de la mañana y después, otra vez, al mediodía. La mayoría de los pescadores llegaron a las cuatro capturas de cupo y, algunas, de un tamaño bastante interesante». También destacó el bajo caudal de los ríos: «Van con poca agua y eso fue lo que me contaron desde otros lugares de la provincia».
En ese sentido, se manifestó también Toño Monteiro, integrante del Club de Pesca O Peixe, que se hizo con capturas de buenas dimensiones, incluida una de 1,5 kilos, en el coto de Ponteliñares-Xinzo: «Sabíamos que todos los ríos llevan muy poca agua, pero aquí confiábamos que hubiera el primer día buenos ejemplares con hambre y picaron».
BERGANTIÑOS, COSTA DA MORTE, INTERIOR CORUÑÉS
Mucha diferencia en el número de aciertos
En la Costa da Morte, el número de capturas fue muy distinto, dependiendo de los cauces. Los peores resultados se obtuvieron en el río Grande, tanto en el coto de Baio como a su paso por el municipio de Vimianzo. Los aficionados tuvieron muchas dificultades para reunir las seis truchas del tope y la mayoría se fueron a casa con una o dos capturas, como mucho. Tampoco fue fácil la jornada en el embalse de As Encrobas, en Cerceda, que se abría por primera vez a la pesca y despertó mucho interés, aunque los deportistas se quejaron de las dificultades para acceder.
Mucho más agradable fue la mañana para los que eligieron el Anllóns. El río parece, según lo visto, lleno de truchas, aunque son de pequeño tamaño. Muy semejante es lo que vivieron los que se estrenaron en el Xallas.
A MARIÑA
Esperando a mayo
La participación fue absolutamente testimonial en esta área de Galicia, porque los en los ríos trucheros importantes (el Eo, el Masma y, al menos, los tramos bajos del Ouro), la temporada no comienza hasta mayo.
lugo
Bajo caudal
En Lugo, la apertura de la veda de la trucha estuvo marcada por la presencia de la directora xeral de Patrimonio Natural, Belén do Campo, que eligió el río Ladra, a su paso por Outeiro de Rei y Begonte, para inaugurar oficialmente la temporada y conocer de primera mano las impresiones de los cañistas en el nuevo período hábil para la pesca fluvial. Do Campo deseó la mejor de las suertes a los 8.822 aficionados con licencia en toda la provincia lucense (41.000 en toda Galicia, con un incremento de 4.000 este año), y aprovechó su visita al río Ladra para destacar la gran riqueza natural de esa zona, incluida en la Rede Natura 2000 y en la Reserva de Biosfera Terras do Miño.
En cuanto al desarrollo de esta primera jornada, el bajo caudal de los ríos fue el principal problema. «Están secos, achicados, e iso dificulta moito as capturas e obrígache a traballar moi ben a cucharilla», lamenta Fernando Prieto, de la asociación Amigos do Río Parga. «A xornada deixou pezas bastante boas, aínda que non moi cuantiosas. Houbo un que colleu unha de preto de dous kilos nun tramo de corrente forte», contó Prieto, que también probó con la mosca afogada y la lombriz durante una larga mañana con buen ambiente en el río y tras la que volvió a casa con el cupo (cuatro truchas) completo.
barbanza y outes
Debutantes, a pesar de las circunstancias
«Entrou moi pouca troita e, por enriba, pequena. A única boa que pillei non a dei sacado do río», explicaba Antonio Vilar, un pescador de Ledoño, en Culleredo, que apostó por arrancar la temporada en el embalse de A Fervenza. Opinión similar a la que manifestaban varios aficionados repartidos por ríos como el Tines, en Outes, o el Maroñas, en Mazaricos.
Incluso los que tuvieron la fortuna de obtener un coto para el tramo sin muerte del río Xallas (uno de los más trucheros de Galicia) tuvieron suerte dispar.
«Collín dúas grandes case seguidas a primeira hora e despois, nas catro horas seguintes, non collín nada», apuntaba el mazaricano José Manuel Quintáns.
Como acostumbra a suceder, fueron muchos los que aprovecharon el primer día de la temporada con buen tiempo para estrenarse en esta afición. Uno de ellos fue Marcos Alvite que, con solo 6 años, realizó sus primeros lanzamientos acompañado de su padre en el entorno de la Ponte de Brandomil. Tuvo suerte porque logró capturar dos truchas que, debido a su reducido tamaño, tuvo que devolver al río.
Xoán León, presidente de la sociedad de caza Castelo de Vitres-Folgoso, que engloba a aficionados de Boiro y A Pobra, señala que en los ríos de Arousa norte prácticamente no hay trucha, por lo que los pescadores buscan otros cotos fuera de la zona. Recalca el fuerte impacto que ha tenido la acción depredadora de nutrias y visones. Asimismo, subraya que la entidad ha reclamado en varias ocasiones que se vede el río Barbanza, el único en el que queda trucha autóctona, sin que hasta la fecha se haya atendido su solicitud.
ferrolterra
Demanda de limpieza de los ríos
«Fue bien la mañana. Hablé con los compañeros y todos fueron cogiendo alguna trucha», explica el presidente de la Sociedade de Pesca Deportiva do Río Xuvia, Javier Padín. La entidad tiene medio centenar de licencias de pescadores entre río y mar y unos cuarenta federados.
La temporada en Ferrol arranca principalmente en As Forcadas y el río Belelle. Xuvia (los ríos de reo) no abrirán hasta el 1 de mayo. El primer día madrugaron (a las siete de la mañana) los aficionados veteranos a este deporte en una temporada abierta hasta agosto. «Tenemos un problema muy gordo para que haya relevo generacional. Habrá sobre una treintena de niños que vienen con sus padres, abuelos... y para que uno salga es muy difícil. Mientras que son pequeños es fácil y van», advierte.
Las demandas del colectivo pasan porque la Xunta se implique en la limpieza de los ríos. «Se dedican a cobrar y nada más. Los ríos da vergüenza cómo están», lamenta. Por ello la sociedad ha propuesto su colaboración para adecuar la zona. «Tenemos que hacer algo, lo que nos manden dentro de nuestras posibilidades. No podemos quitar árboles de los ríos, pero limpiar caminos, quitar maderas… Estamos con la pelea para poder colaborar en la limpieza», señaló Padín.
santiago
Afluencia en los embalses, optimismo en los ríos
Jorge García Duarte, secretario de la Asociación Deportiva de Pesca de Santa Comba, estaba ya a las siete de la mañana en el embalse de A Fervenza para estrenar la temporada. Pasan los años y reconoce que el cosquilleo del primer día siempre está ahí. También apunta otra sensación, que cada año es más difícil sumar piezas, particularmente en este, «pola escasez de auga». «Non tiven o favor delas», confiesa en buen tono.
El buen tiempo se convirtió en aliado: «O día presentouse moi bo, moi agradable, e había moitísima xente no embalse». Otra cosa fueron las capturas: «Está baixo de auga (máis pola xestión da mesma que pola sequía) e iso nótase. En canto a pesca, foi un día pobre na nosa zona. Estes escenarios deron algúnha peza boa, pero en xeral a pesca foi escasa».
Por lo que pudo hablar con otros compañeros que optaron por ir al coto, allí era más difícil fijar una pauta: «Alguns a media mañán xa tiñan o cupo cuberto e outros apenas nada». También constataron que el cauce baja con menos caudal del que suele ser habitual por estas fechas. «O cauce dos ríos baixan cun caudal alegre que invitaba ó optimismo. Baixan alegres, con augas frías e transparentes, e os pescadores de culleriña tiveron boa pesca dende primeira hora e os de mosca tamén moveron nas horas de máis calor. O cebo natural marcou a pesca máis irregular, co seu mellor momento nas primeiras horas co abrir do día», analiza.
deza y tabeirós
Decepción, para empezar
La apertura no fue tan fructífera como estaba previsto al inicio del día, en el que las excelentes condiciones climáticas permitían a los pescadores encarar con ánimos la esperada jornada inaugural. Fue en las primeras horas cuando se registraron las mayores capturas en unos ríos que presentaban un caudal escaso para la época, especialmente en los estradenses. No fue un gran día en los cotos de A Estrada, donde los pescadores coincidían en la escasez de capturas. En los de Liñares, Vea y Rubín pocos fueron los que consiguieron el cupo, siendo mayoría aquellos que a duras penas conseguían sacar las codiciadas pintonas.
Las malas sensaciones hicieron que muchos tirasen la toalla y regresaran a casa antes de tiempo. En las zonas libres hubo poca afluencia a media mañana y antes del mediodía los ríos estaban desérticos, prueba inequívoca de que el primer día de la campaña no estaba siendo como esperaban. Los pocos pescadores que seguían probando suerte se mostraban resignados, mostrando alguna trucha que daba la medida y señalando que el poco caudal en algunos podría ser la causa de tan escaso botín.
En los ríos de la comarca dezana la situación fue similar. Miguel Montoto, señaló que en el Arnego se encontraba en perfectas condiciones para pescar. «Non é habitual que vaia tan baixo, pero está bonito para pescar», explicó. En este sentido, aseguraba que había bastantes pescadores en la zona y que las capturas eran las normales para el primer día. En los cotos de los ríos Toxa y Deza las sensaciones eran dispares. Salvo contadas excepciones, los pescadores consultados, que emplearon cucharilla y cebo, afirmaban no haber conseguido ninguna captura durante la mañana. Los motivos que esgrimían estaban relacionados con el tiempo, indicando que se había levantado bastante viento y que volvió el día desapacible, lo que provocó que las truchas no estuvieran activas.
Información elaborada por Luis M. Rodríguez, Cristina Viu, José Alonso, I. Meitín Buján, Fran Brea, Xoán Ramón Alvite, Ana Gerpe, Carla Elías, M. G. Reigosa, David Cofán y P. Gómez Cundíns.