El guardameta senegalés fue expulsado al encararse con la grada, lo que desencadenó el plante que provocó la suspensión del partido
01 abr 2024 . Actualizado a las 18:51 h.El Sestao-Rayo Majadahonda, un duelo por la permanencia en Primera Federación, quedó suspendido este sábado en el minuto 84, justo tras materializarse la remontada del equipo vasco (2-1) con un gol de Álex Carbonell, tras los incidentes racistas en los que se vio implicado el meta senegalés del Majadahonda, Kane Sarr. Tras encajar el tanto, el meta, de 23 años, saltó la valla de publicidad tras escuchar, según denunció posteriormente su propio club, insultos racistas por parte de un grupo de aficionados del Sestao asentados en ese fondo. Sarr agarró por la bufanda a uno de esos aficionados antes de regresar al campo.
El asistente del árbitro asturiano García Riesgo, que presenció la escena, advirtió al colegiado, que expulsó al meta. La tarjeta roja, la segunda que vio el Majadahonda, que ya jugaba con diez por la expulsión de Kike Hermoso, enfadó notablemente a Kane Sarr, que fue sujetado por sus compañeros.
Tras unos segundos de desconcierto, los futbolistas del Majadahonda tomaron el camino del vestuario en solidaridad con su portero y el partido no pudo terminarse. «Nuestro equipo no saldrá de nuevo a reanudar el encuentro tras recibir insultos racistas inadmisibles a nuestro jugador. Condenamos todo tipo de insultos racistas en el deporte», señaló el Majadahonda en un comunicado.
«El árbitro lo suspendió porque nosotros nos negamos a jugar», reconoció Iñaki Acha, vicepresidente del club madrileño. «Es una vergüenza lo sucedido. Parece mentira, año 2024», escribió Jorge Casado, jugador del Rayo, en sus redes sociales. «Parece ser -explicó Acha- que a raíz del segundo gol del Sestao nuestro portero llevaba tiempo recibiendo algunos insultos racistas, pero a partir de ahí la cosa se ha complicado. Había un grupo bastante numeroso detrás de esa portería y le han empezado a insultar llamándole negro».
El vicepresidente del club madrileño añadió que «él (Sarr) ha perdido un poco los papeles porque ha saltado la valla, cosa que no tenía que haber hecho nunca. Y a partir de ahí el arbitro lo ha expulsado». «Se ha ido hundido al vestuario y los compañeros se han ido con él y no han querido volver a salir al campo», señaló.
El directivo del Rayo quiso dejar claro que «con el Sestao» las cosas han ido «muy bien». «Es un club con el que nos llevamos fenomenal», apostilló. «Ellos estaban a nuestra disposición en todo momento y lamentando que cuatro personas de las 3.000 o 4.000 que había en el campo tengan este problema», valoró.
«Los antidisturbios de la Ertzaintza han desalojado el fondo, el portero estaba totalmente hundido, los jugadores (del Rayo) no han querido salir» y «el arbitro suspende porque nosotros nos negamos a jugar», relató. El Rayo Majadahonda, a través de sus redes sociales, informó: «Nuestro equipo no saldrá de nuevo a reanudar el encuentro tras recibir insultos racistas inadmisibles a nuestro jugador». «Condenamos todo tipo de insultos racistas en el deporte», añadió el club madrileño.