Eurocopa 2024: Un título continental por el que suspiran seis selecciones

Igor Barcia / Ignacio Tylko COLPISA

DEPORTES

CATI CLADERA | EFE

Inglaterra, Francia, España, Portugal, Italia y la anfitriona Alemania forman la lista de aspirantes para esta apasionante Eurocopa 2024

13 jun 2024 . Actualizado a las 10:48 h.

Desde el 14 de junio y hasta el 14 de julio, 24 selecciones pugnarán por un trofeo y son seis los combinados que destacan por encima del resto en el ránking de favoritos a estar en la final. Inglaterra, Portugal, Francia, España, la anfitriona Alemania y la defensora del título Italia son las que cuentan con mejores mimbres para inscribir su nombre en el palmarés del campeonato de Europa de fútbol del 2024.

Inglaterra. Jude Bellingham. El jugador inglés será uno de los principales candidatos a ganar esta edición el Balón de Oro.
Inglaterra. Jude Bellingham. El jugador inglés será uno de los principales candidatos a ganar esta edición el Balón de Oro. Carl Recine | REUTERS

INGLATERRA

La hora de la verdad

Después de alcanzar la final de la pasada Euro, Gareth Southgate aspira a que por fin su grupo levante un gran trofeo y premiar así el talento que atesora Inglaterra en sus filas. Serbia, Dinamarca y Eslovenia son los primeros rivales de una selección que no debe tener problemas para avanzar y crecer. Bellingham y Harry Kane son las principales estrellas de la lista, donde también se encuentran Cole Palmer, Saka o Phil Foden.

Kylian Mbappé en un encuentro con la selección francesa de fútbol
Kylian Mbappé en un encuentro con la selección francesa de fútbol CHRISTOPHER NEUNDORF | EFE

francia

Mbappé lidera la selección

Doble campeona (1984 y 2000), Francia no ha conseguido pelear por la Eurocopa en las últimas ediciones. Didier Deschamps acepta el reto y quiere coronar a su equipo en Alemania, y para eso cuenta con un grupo liderado por Kylian Mbappé y Antoine Griezmann. Alrededor de ellos la receta habitual, un equipo sólido, físico, muy trabajador, donde muchas veces el brillo de sus estrellas queda eclipsado por el esfuerzo colectivo.

España. Pedri. El jugador tinerfeño del Barcelona ha recuperado su mejor versión antes de la Eurocopa.
España. Pedri. El jugador tinerfeño del Barcelona ha recuperado su mejor versión antes de la Eurocopa. AFP7 vía Europa Press | EUROPAPRESS

ESPAÑA

Busca su oportunidad

España llega a la Eurocopa dispuesta a brillar y convertirse en la selección más laureada en un torneo que ha ganado en tres ocasiones. Luis de la Fuente afronta su primer gran torneo con la selección, tras ganar la Liga de Naciones del año pasado. Aparece en Alemania con un bloque joven armado en torno a Rodri Hernández, un futbolista fundamental en el equipo y sobre el que gira todo el juego.

Portugal. Cristiano Ronaldo. Será la última Eurocopa del astro luso. Es el máximo goleador dela historia del torneo con 14 tantos
Portugal. Cristiano Ronaldo. Será la última Eurocopa del astro luso. Es el máximo goleador dela historia del torneo con 14 tantos Rodrigo Antunes | REUTERS

PORTUGAL

Cristiano al mando

La selección volverá a estar liderada por Cristiano Ronaldo, que disputará su sexta Eurocopa, un torneo donde ostenta el récord de goles (14) y partidos (25).

Alemania. Toni Kroos. El centrocampista busca agrandar su legado ganando el torneo antes de retirarse
Alemania. Toni Kroos. El centrocampista busca agrandar su legado ganando el torneo antes de retirarse CHRISTOPHER NEUNDORF | EFE

ALEMANIA

El último baile de Kroos

El hecho de jugar en casa y hacerlo con una nueva generación que viene de ganar a Francia y a los Países Bajos en amistosos parecen haber devuelto el optimismo a Alemania. Estarán comandado por Kroos, que se retira al final del torneo.

Italia. Donnarumma. El portero del PSG será clave para los objetivos de la selección italiana en esta competición
Italia. Donnarumma. El portero del PSG será clave para los objetivos de la selección italiana en esta competición Jennifer Lorenzini | REUTERS

ITALIA

Selección nueva

Italia alcanzó la fase final de Alemania mientras llevaba a cabo una reconstrucción en el grupo con nuevos talentos. Italia, que, por tanto, defiende título, ha sufrido dos importantes bajas (Acerbi y Scalvini) que han trastocado los planes de Spalletti.

La Eurocopa recupera su esencia cercana y festiva

Cuenta atrás para que Alemania reviva su cuento de hadas con el espíritu y el legado del Mundial 2006

La Eurocopa asoma con el partido inaugural entre los anfitriones y Escocia (este viernes, 21.00 horas, La 1) en el imponente Allianz Arena de Múnich. Alemania ultima los detalles para la gran fiesta continental, con presencia de 2,7 millones de aficionados que llenarán los diez magníficos y coloridos estadios (nueve del Mundial de 2006, a los que se suma Düsseldorf), que acogerán 51 partidos del torneo hasta el 14 de julio.

La organización, al mando de Phillipp Lahm, antiguo capitán de los campeones del mundo en el 2014, calcula recibir a 12 millones de personas. Nada que ver este jolgorio con la tristeza de la Eurocopa precedente. Fue diseñada en 12 ciudades repartidas a lo largo y ancho del continente para conmemorar el 60.º aniversario de la creación del evento, pero fue una de las citas damnificadas por la pandemia y tuvo que aplazarse un año, al verano del 2021. Las consecuencias de la pandemia se hicieron visibles.

Alemania se inspira y apoya en la herencia del 2006, con ese Mundial organizado de maravilla de la mano del recordado Franz Beckenbauer. Para aquel campeonato se transformaron muchos estadios, entre ellos el legendario Olímpico de Berlín, construido para los Juegos de 1936 y cuyas obras duraron cuatro años para poder albergar una final en la que Italia derrotó en los penaltis la Francia de Zidane, expulsado por ese cabezazo a Materazzi. Se da la curiosa circunstancia de que la mitad de los coliseos de la Eurocopa pertenecen a equipos que militan en segunda división, lo que no impide que se llenen cada fin de semana.

Los germanos sueñan con revivir el «Sommermaerchen» o cuento de hadas estival del que disfrutaron hace 18 años. Aquella Copa del Mundo jugó un papel primordial en la idea colectiva de una sola nación. Olvidaron al fin las sombras de un pasado con la población separada por el Muro de Berlín, terrible ejemplo de la división que azotó al mundo en la segunda mitad del siglo pasado. Esa imagen de la Alemania reunificada y moderna se trasladó a los terrenos de juego, donde la «Mannschaft» alcanzó las semifinales.

Fue el germen del equipo que acabaría levantando la Copa del Mundo en Brasil. Según los estudiosos, ese torneo no solo cambió la manera en a que el mundo veía a los alemanes, no considerados precisamente líderes en hospitalidad, y sobre todo, la manera en a que los propios germanos se veían a sí mismos. «Antes del torneo, el ambiente entre los alemanes era muy muy malo. La economía no iba bien, el clima era malo y el fútbol era atroz. Comenzó el Mundial, Philipp Lahm marcó en el primer partido contra Costa Rica y apareció el sol. Fue algo casi bíblico», expone el sociólogo y filósofo Günter Gebauer en una entrevista a la agencia France Presse.

Habitante de un suburbio berlinés, Gebauer recuerda haber visto a un vecino mostrar una bandera en el balcón de su vivienda, asunto tabú en un país que huía de dar muestras de nacionalismo tras el bochorno de la Segunda Guerra Mundial. «Desde entonces, vemos banderas y se canta el himno de Alemania en todos sus partidos, algo que no existía antes», describe Gebauer. Los extranjeros que viajaron al Mundial sintieron a un pueblo alejado de los estereotipos, muy familiar, sin esa rectitud y seriedad características.

Miedos e inquietudes

Superados los complejos, hay dos asuntos inquietantes. Por encima de todo, el temor a los atentados, a los ultras y a los ciberataques. «Desde el inicio, la seguridad es la mayor de nuestras prioridades», insiste Lahm. Y es que en pocas ocasiones el contexto geopolítico se presentó tan tenso, con los conflictos en Ucrania y Oriente Medio como telón de fondo.

La Eurocopa, igual que los Juegos Olímpicos que acogerá París semanas después, se hallan en el punto de mira de extremistas y terroristas, ya que ofrecen una tribuna extraordinaria para todo tipo de reivindicaciones. Alemania estrenará un dispositivo de seguridad inédito. Todas los países participantes enviarán expertos, más de 330 en total, que se reunirán en un centro de cooperación internacional (IPCC) de policía ubicado en Neuss, al noroeste del país.

Como argumenta Oliver Strudhoff, director de ese IPCC, «cada país conoce mejor que cualquier otro a sus alborotadores». Junto con las autoridades alemanas, la Europol y la UEFA, vigilarán y coordinarán el conjunto de medidas de seguridad desde una sala enorme de 500 metros cuadrados equipada con 129 ordenadores y una pantalla gigante. Entre 800 y 1.300 agentes del orden se desplegarán en torno a los diez estadios.

No miedo, pero sí cierta preocupación generan los trenes. Si en otro tiempo la red ferroviaria alemana era un símbolo de eficacia y puntualidad, ahora mismo presenta una infraestructura envejecida, con retrasos descomunales y una serie de huelgas que provocan trenes anulados, correspondencias no respetadas y vagones-restaurantes o cuartos de baño cerrados. Según datos del operador público Deutsche Bank, el año pasado el 36 % de los trenes de larga distancia sufrieron demoras. Y en esto del fútbol, como en la vida, se trata de llegar a tiempo.