Es muy difícil competir en la Liga Endesa sin defensa

Nacho Rama

DEPORTES

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13 oct 2024 . Actualizado a las 00:06 h.

Jugar dos partidos lejos del Coliseum tiene un precio a pagar. Desde el primer minuto, el MoraBanc Andorra fue notablemente mejor en ataque y defensa, con un Nikos Chougkaz estelar con 13 puntos en este cuarto, creando una ventaja de quince al final del primer cuarto. Muchos errores en el tiro por parte del Leyma Coruña, que consiguió solo ocho puntos en jugada.

En el segundo cuarto, el equipo coruñés elevó el nivel defensivo y enseñó su mejor versión, llegando a acercarse en el marcador a apenas cinco puntos de distancia, mostrando más equilibrio ofensivo y siendo más vertical cerca del aro. Pero fue un espejismo. Nuevos desajustes defensivos relanzaron al Andorra con un 20-22 en este cuarto. Parecía que los primeros minutos del tercer cuarto serían importantes para el devenir del encuentro, y así fue, definitivamente. Otra mala puesta en escena del cuadro herculino terminó con un parcial de 12-3 y seis pérdidas en el tercer acto, 18 en total.

Las dudas de los coruñeses, muy blandos en el uso de las faltas, rompieron el encuentro y los esfuerzos del equipo naranja pasaron por mejorar la imagen y ganar experiencia en la competición.

Hay que adaptarse al cambio de categoría, habituarse a ganar pocos partidos después de un año en el que ganarlo casi todo era la norma. En el partido de ayer, el Leyma Coruña no fue todo lo competitivo que todos deseábamos, pero esto es un proceso y hay que continuar trabajando para salir adelante. Esto es muy largo, hay que seguir construyendo.

Quiero quedarme con las cosas buenas del partido, las que nos sirvan para crecer. Me quedo con que, una jornada más, ganamos el rebote y especialmente el ofensivo. Quiero destacar también los primeros minutos de Trey Thompkins con la camiseta naranja, que, pese a no ser los mejores, sirvieron para establecer una primera toma de contacto del estadounidense con la competición otra vez.

Es importante, asimismo, hacer una lectura de la dureza que exige la Liga Endesa, y, sobre todo, que después de tres jornadas tenemos una victoria en nuestro casillero y ha sido contra un rival como el Real Madrid, hecho del que pocos podrán presumir a final de temporada.