Vivir una experiencia de salón a pie de pista es lo que sortea el Baxi Ferrol en cada partido de Liga y Eurocup Women
08 nov 2024 . Actualizado a las 05:00 h.Un chester azul. Puro contraste con las sillas rígidas de los banquillos del pabellón de A Malata en los partidos que el Baxi Ferrol disputa como local en la Liga Femenina Endesa y en la Eurocup Women. Un sofá que acapara miradas y en el que todo aficionado al baloncesto en Ferrol quiere sentarse.
Pero ¿quién está detrás de este nuevo atrezo? Desde el club explican que Baxi, principal patrocinador del combinado ferrolano, ha querido incluir este sofá exclusivo para que dos aficionados puedan «vivir el partido como si estuvieran en el sofá de casa». Así, desgranan, en cada partido se efectúa el lanzamiento de una pelota a la grada y la persona que la recoge dispone del privilegio de, con un acompañante, poder seguir el partido desde un lugar privilegiado.
Privilegio de la cantera
Las dos últimas agraciadas, que disfrutaron de la vibrante victoria del Baxi contra el Ensino, fueron las dos cadetes en dinámica del primer equipo Carmela Permuy y Elena Baldonedo, que había debutado hacía escasos días en A Malata en competición europea. En este caso, confiesan desde el Baxi, se hizo una excepción para que Permuy, que viene de pasar por el quirófano por una lesión de rodilla, pudiese reencontrarse con A Malata de la forma más especial.
Ambas, más acostumbradas a vivir el baloncesto a pie de pista, cogieron el testigo de Juan Carlos y Martín Varela, novatos en la experencia y premiados en el partido de Eurocup en el que el Baxi se impuso al Azores. El azar quiso que padre e hijo pudiesen vivir una experiencia difícil de olvidar, según reconocía el propio Juan Carlos: «La bola cayó cerca de donde estábamos. Se vive de diferente manera. Lo estamos pasando bien. Se ve todo desde otro punto de vista en comparación con la grada. Estamos disfrutando muchísimo», valoraba. «Se ve todo tan cerca...», subrayaba este ferrolano situado a un palmo de la línea de fondo desde la que instantes después arrancaron jugada las de Lino López.
Coincidía con su padre el pequeño Martín: «Cambia mucho», destacaba. Ambos, detallaba el padre, han convertido en plan habitual el disfrutar juntos del baloncesto. Costumbre que, atestiguan los cerca de 1.600 socios del club, cada vez comparte más gente. El domingo 17 frente al Joventut el sofá azul de A Malata volverá a ser la localidad más cotizada para los amantes de la canasta en Ferrol.