La carrera por la presidencia de la RFEF, pendiente del recurso de Rocha

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J.J.Guillen | EFE

La Audiencia resolverá el miércoles la apelación del extremeño para poder ser candidato, con Louzán entre las alternativas si concita un consenso

24 nov 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

El complejo proceso de sucesión en la Real Federación Española de Fútbol entra en sus días decisivos. Después de la abrupta salida de Luis Rubiales como consecuencia del beso no consentido a Jenni Hermoso y las supuestas irregularidades de su gestión, toda la maquinaria electoral se vio alterada por los múltiples procesos judiciales abiertos. La votación de los nuevos 141 asambleístas que decidirán al próximo jefe del fútbol español —una entidad que movió un presupuesto de 392 millones este ejercicio— se realiza mañana. El resultado será continuista, formado mayoritariamente por personas de confianza de los presidentes territoriales, el cuerpo clave en este tipo de cónclaves pese a las repetidos ajustes introducidos por el CSD en el procedimiento. Apoyan de forma unánime a Pedro Rocha frente a un único candidato alternativo anunciado hasta ahora, Juanma Morales, hasta hace unos días CEO del Grupo IFA, y que incluye en su equipo a rostros conocidos como los exfutbolistas David Villa, Luis Milla y Virginia Torrecilla. Pero Rocha, que llegó al cargo como adjunto a Rubiales, del que poco a poco trató de marcar distancias, fue inhabilitado por el TAD por haberse extralimitado en su toma de decisiones cuando era presidente de la gestora. Ese proceso, después de múltiples disputas judiciales, vivirá un episodio clave el miércoles en la Audiencia Nacional, que debe decidir si acepta su recurso para la aplicación de medidas cautelares. Y el fútbol español sabrá si el favorito para presentarse a la reelección, en la votación del 16 de diciembre, queda antes apartado del proceso para gobernar los cuatro próximos años.

Si el dirigente extremeño, que proclamó a su llegada la intención de ser poco más que un interino, gana su recurso, se presentará —antes del 2 de diciembre— a las elecciones con el requisito de reunir 21 avales. Nadie duda de que arrasaría en la votación final con el amplísimo apoyo de la asamblea y de todos los barones territoriales.

Si Rocha continúa inhabilitado se abre un escenario que lleva tiempo cociéndose, pero muy incierto. Pese a los múltiples contactos de las últimas semanas, no hay un candidato consensuado por los presidentes de las territoriales.

El propio Rocha ve bien que el presidente de la Federación Gallega, Rafael Louzán, dé un paso al frente y retome su proyecto con el apoyo de las territoriales. Un respaldo que, en estos momentos, no se explicita por nadie por los propios tiempos de los recursos de Rocha.

Louzán fue inhabilitado para cargo público por siete años en una sentencia que ratificó la Audiencia de Pontevedra en el 2022. Según su entorno, esa inhabilitación parcial, recurrida ante el Supremo, solo afecta al desempeño de cargos en la administración pública. Pero la RFEF es una entidad privada con competencias públicas delegadas. Legalmente podría presentarse a la presidencia, aunque con ciertas limitaciones en su recorrido en cargos de instituciones internacionales como la UEFA y la FIFA.

La vía de Louzán goza ya de amplios apoyos dentro de los dirigentes de las territoriales. A su favor, juegan las buenas relaciones que mantiene con la Liga y su presidente, Javier Tebas, después de décadas de enfrentamientos entre los dos grandes actores del fútbol español. En contra, la inhabilitación vigente y la posible presión política de sectores próximos a Pedro Sánchez, que no verían con buenos ojos el ascenso de un dirigente que ocupó cargos con el Partido Popular, como la presidencia de la Diputación de Pontevedra, y con un asunto pendiente en la justicia.

Louzán, que preside la Federación Gallega de Fútbol desde el año 2014 y concita un amplio apoyo dentro del balompié autonómico gracias a la modernización que realizó en sus estructuras, contará con el respaldo de los asambleístas gallegos que se elijan mañana. Y contaría con el apoyo de los dirigentes de varias de las territoriales y posiblemente con el de los votantes del entorno de la Liga. En este proceso, sin manifestarse públicamente, mantienen más recelos hacia el dirigente gallego y tienen sus propias aspiraciones el titular de la valenciana, Salvador Gomar, y el rector de la andaluza, Pablo Lozano, entre otros.

Después de que el miércoles se conozca la resolución de la Audiencia Nacional, los presientes de las territoriales tienen previsto reunirse. Si Rocha no puede presentarse, ahí empezará ya una nueva carrera contra el reloj por la presidencia de la RFEF.