El subdelegado del Gobierno en Pontevedra, Abel Losada, anunció la aprobación de 8,73 millones de euros para conservar las carreteras nacionales de Deza-Tabeirós y la zona de Arousa-Ullán. Esta inversión del Ministerio de Transporte y Movilidad Sostenible se emplearán en mejorar y acondicionar los 167,4 kilómetros de viales que cruzan estas zonas y que, apuntó Losada, «precisan dun arranxo o antes posible despois dos adversos efectos dos últimos temporais».
Las obras afectarán a la Nacional 525 desde Lalín hasta el límite con la provincia de A Coruña, el tramo antiguo de la travesía N-525 a la N-550, desde Caldas de Reis hasta el límite con la provincia de A Coruña y el trazado antiguo de este vial en Caldas. A estos se añaden la N-640, desde Vilagarcía a Agolada y las travesías de esta nacional y el acceso al hospital del Salnés.
El contrato tiene una duración de tres años con posible prórroga de otros dos y otros nueve meses. Como novedad, las empresas licitadoras deberán incluir en sus ofertas el cálculo de la huella de descarbonización que generarán durante la ejecución de las obras en cada uno de los tramos de estas carreteras.
Abel Losada animó al PP a realizar una «política constructiva» sobre el mantenimiento de los viales nacionales, después de cuestionar su estado en varias comarcas, como Deza-Tabeirós, así como en el pleno de la Diputación. El subdelegado aludió al pasado «moi escuro neste ámbito» de los populares cuando entre el 2012 y el 2018 recortaron, dijo, «ata un 25 % os fondos estatais destinados á conservación da rede e, como todos os datos técnicos indican, a vida útil dun pavimento é duns quince anos, polo que boa parte das fochancas de hoxe son froito de aqueles recortes». Y cuestionó que entre las quejas y en la foto estuviese la exministra de Fomento que tomó esa medida.