Apinatura de A Coruña y Mel de Brea, de A Estrada, las mejor clasificadas
23 jul 2020 . Actualizado a las 22:16 h.Galicia también puede presumir de mieles. La comunidad es desde hace tiempo una potencia en la producción y elaboración de este producto, y de ahí que cuente también con reconocimientos internacionales. Es el caso de los recientes London Honey Awards, un concurso internacional de gran prestigio en el que un panel de expertos catadores prueba a ciegas centenares de muestras de todo el mundo. De ellas, solo 160 han obtenido reconocimiento, en forma de medalla. Y Galicia ha conseguido cuatro de estos premios: dos oros (Mel de Brea de a Estrada y Api Natura de A Coruña), una plata (Mel Abella Obreira de Riós) y un bronce (Mel Rural de Brezo de Quiroga). Tres de estas muestras fueron enviadas al certamen por la Asociación Galega de Apicultores, pues fueron productos premiados también en su concurso Meles Cinco Estrelas.
Entre 85 y 95 puntos obtuvieron las dos elaboraciones gallegas que se hicieron con una medalla de oro en el certamen. La primera de ellas es de A Estrada, se llama Mel de Brea y es obra de María del Mar Brea Botana. La otra es Premium La Original, de Api Natura, obra de un joven de 26 años que decidió convertir su pasión en profesión y que ahora cuenta con 500 colmenas en Oza-Cesuras. «No sometemos la miel a ningún filtrado y se obtiene por decantado (algo de lo que no tenemos constancia que realice nadie en España para una miel de este segmento). No se somete a procesos de pasteurización y conseguimos, mediante un proceso muy lento, obtener una miel que conserva inalteradas todas sus propiedades», le contó Elías Seoane, este joven apicultor, a la delegación de La Voz en A Coruña. Otra peculiaridad de sus colmenas es que practica la trashumancia, pues las lleva de un lugar a otro de Galicia buscando árboles y flores diferentes. «Empezamos la temporada en las Rías Baixas y vamos subiendo a medida que cambian las temperaturas y las floraciones».
Abella Obreira es la miel que elabora en Riós David Souto. Su producto obtuvo una medalla de planta en el certamen, lo que significa que logró una puntuación de entre 75 y 85. «A verdade é que eu non cría moito nestes premios e tampouco o esperaba», cuenta. Ahora, empieza a estar convencido de que este tipo de certámenes son un aval para reconocer la calidad de los productos. La suya es una miel de carballo y castaño, «un mel escuro que levo nove anos facendo», explica. Apicultor no era su profesión hace solo unos años. Fue la crisis económica la que lo llevó a volver al campo y empezar «con vinte colmeas» este nuevo oficio. Hoy tiene más de quinientas. «É un cambio moi drástico, pero como me gusta o rural e o monte...», añade. La peor parte, que su sustento dependa de las condiciones meteorológicas, «e hai anos bos e outros non», explica. Como el actual, donde las perspectivas no son muy buenas. Buena parte de su producción se exporta a granel a Alemania.
A granel también vende buena parte de su cosecha Manuel Macía, de Quiroga. Su Mel de Brezo obtuvo una medalla de bronce en el certamen, pero es que asegura que es un producto muy especial «porque eu quería ter un produto que non tiña ninguén», explica. Así que cuando hace más de treinta años instaló sus colmenas se decantó por la zona de O Courel, donde asegura que la miel logra unas características muy especiales. La Mel de Brezo «é máis forte e non tan doce coma a de eucalipto», cuenta, de ahí que no cuente con tanta demanda. Actualmente, él vende entre 10 y 12 toneladas de miel, la mayoría, en Europa y a granel.