La empresa arousana de reparto a domicilio CayLu operará la próxima semana en A Estrada

Rosa Estévez
r. estévez REDACCIÓN / LA VOZ

A ESTRADA

02 sep 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

En verano del 2020, el futuro era una promesa informe para la gran mayoría de las personas. En plena pandemia, una gran mayoría de personas se conformaban con aguantar día a día hasta que pasase esa extraordinaria tormenta que fue el covid-19. Sin embargo, en aquel contexto de dudas y temores, Beatriz Castro y Antonio Luaña decidieron liarse la manta a la cabeza y poner en marcha una empresa que ayudase al sector de la hostelería y la restauración a hacer frente a sus nuevas circunstancias: había llegado el bum de los pedidos a domicilio y muchos establecimientos no tenían cómo hacerles frente. Así, con dos repartidores «y los dos jefes haciendo de todo» nació CayLu, una plataforma de reparto que tres años después está a punto de abrir su primera delegación fuera de Galicia. Zamora es la localidad elegida para ese gran salto; la apertura en esta ciudad castellana está prevista para octubre.

Hasta entonces, los responsables de CayLu seguirán dando pasos. Tras muchos meses de trabajo, la próxima semana está previsto que empiecen a operar en A Estrada; luego vendrán Monforte y Redondela, Porriño y Mos... Está claro que este tipo de localidades de tamaño mediano son el fuerte de una empresa que medita cada paso que da. «Crecer por crecer no tiene sentido», explica Beatriz Castro. Hay que asegurarse de que se puede sostener el servicio con la calidad requerida tanto por las empresas de restauración con las que trabajan, como por el cliente final, el consumidor que va a recibir en casa su pedido.

En estos momentos, CayLu tiene una plantilla de 40 trabajadores en sus delegaciones de O Salnés, Pontevedra, O Morrazo y Lugo. Son profesionales que están contratados porque en esta firma arousana «no queremos falsos autónomos», dice Castro marcando distancias con otras plataformas mucho mayores en tamaño, pero también cicateras con sus «riders». En este caso, dice Castro, se cuida al personal. Y aún así, señala es difícil completar plantillas.

Esos repartidores, que se mueven en vehículos de la empresa —CayLu tiene una amplia flota de motos y coches—, son puentes móviles entre los 150 locales de hostelería a los que ahora da servicio y los consumidores finales. Entre toda esa cadena se ha establecido una excelente relación. «Es de lo que tenemos que conseguir, que todo el mundo esté satisfecho con nuestro servicio», explica Castro, cuya experiencia en el sector de la hostelería ha sido crucial para la maduración del proyecto CayLu y para su crecimiento sostenido, pausado, alejado de prisas y de euforias.