A Estrada acogió un simulacro de búsqueda con final feliz
19 oct 2024 . Actualizado a las 05:00 h.Celsa es una anciana que vive en la residencia estradense y tiene 90 años. Nunca se ha perdido de veras, pero este viernes ha vivido en directo una experiencia parecida al convertirse en protagonista de un simulacro de búsqueda con la última tecnología que maneja el Grupo de Apoio Loxístico (GALI) de la Axencia Galega de Emerxencias (Axega).
Eran las 11.00 en punto de la mañana cuando Celsa empezó a vagar por los jardines que rodean el Centro Integrado de Atención ás Emerxencias-112 Galicia en A Estrada. Llevaba en su muñeca un reloj de localización diseñado en el marco del proyecto Dronefinder, desarrollado por la UTE Aeromedia, Indra y el Instituto Tecnolóxico de Galicia para la Axega. El reloj tiene dos años de autonomía sin necesidad de carga y marca la hora como un reloj cualquiera. Pero tiene una ventaja adicional que puede salvarle la vida a su dueño. En caso de que el poseedor se pierda, el reloj se activará al recibir la llamada que se le hace desde un dron de búsqueda que puede cubrir un rango de 10 kilómetros de distancia. Con él, la localización es cuestión de minutos. Quedó demostrado ayer con Celsa. Pero como, de momento, estos relojes específicos todavía no han sido adquiridos por la Xunta para poder ser distribuidos entre la población de riesgo, en el simulacro de ayer, se probaron otros dos sistemas de búsqueda desarrollados al amparo del proyecto Dronefinder y que sí se están ya en funcionamiento.
Según explica el director de Emergencias de Aeromedia y responsable del proyecto Dronefinder, César Ortega, en caso de que el desaparecido no lleve este tipo de reloj, existen otros dos escenarios de búsqueda.
Sin cobertura, aún mejor
Si el desaparecido lleva consigo un teléfono móvil, un dron puede hacer la búsqueda de su teléfono en un rango de 1,5 kilómetros. Si el móvil está apagado, no serviría de nada, pero en cambio si está sin cobertura la localización es más fácil todavía que si la tiene. «El dron lleva un dispositivo que simula ser una torre de telefonía. El móvil intentará conectarse a ella y si no tiene un repetidor de móvil que le haga competencia, mejor», explica Ortega.
El tercer escenario es aquel en el que el desaparecido no lleva ni el reloj ni móvil. Aún así, las nuevas tecnologías ofrecen muchas opciones de búsqueda. Los nuevos drones con cámara RGB y cámara térmica entrenados con inteligencia artificial permiten distinguir personas y animales, por ejemplo. Eso, en zonas de monte, es una pista vital.
El conselleiro de Presidencia, Diego Calvo, siguió ayer en directo el falso rescate de Celsa. Desde que se pusieron en funcionamiento en 2016, los drones del GALI fueron ya movilizadas en más de cien ocasiones. En 2025 habrá 721.300 euros más para el proyecto Dronefinder.