Falleció en Lalín Luis A. González Mato, a los 82 años. Un paradigma de emprendedor. A principios de los años 60 se estableció en Lalín con relojería en la calle Loriga, la zona privilegiada del comercio local con referencias como la tienda de tejidos de Manuel García, la frutería de El Rubio de Donramiro, la chocolatería de Manuel González, los coloniales de Higinio o cueros Balado, rememora Daniel González Alén. Aquella relojería se amplió para constituir la joyería González Mato, una referencia con las primeras marcas de un sector en que el empresario natural de O Corpiño se afianzó.
Sus donaciones de trofeos en competiciones deportivas o en eventos de las fiestas eran habituales, y llegó a ocupar cargos en la asociación de joyeros de la provincia.
Pero su carácter emprendedor le llevó más allá de la joyería. A finales de los años 80 en su Leira Grande de Gonsobrado, en Goiás, se embarcaba en una ganadería selecta que llegó a manejar 80 terneros de calidad y 20 madres. Quiso darle salida a la produccióin a través de la carnicería Gosotega-Deza en 1997, con la calidad como premisa. Trabajador incansable, estuvo en el consejo rector de Ternera Gallega, y fue uno de los impulsores de Feiradeza.
González Mato no fue de los que se callan. Recordada es su reivindicación ante el Concello de Lalín para que la calle X dejase de ser lo que fue, y sigue siendo. Y tampoco le tembló el pulso para denunciar públicamente la inseguridad ciudadana cuando en el año 2012 su céntrica joyería sufrió asaltos sucesivos.
Sus restos se velan en el velatorio de Jesús Taboada, de donde parte hoy jueves a las 16.45 para el funeral en la iglesia parroquial de Lalín ?17 horas?, con entierro en el cementerio antiguo. Deja viuda y tres hijos.