Bruselas califica de «inquietante» que en el año 2030 el abastecimiento exterior se eleve al 70% del consumo Técnicos de la Dirección General de Energía y Transportes de la UE han dado la voz de alarma sobre la «inquietante y excesiva» dependencia energética de Europa de diferentes países de Oriente Medio y de Rusia, proveedores del 40% del consumo actual de los Quince. La cifra puede elevarse al 70% en el año 2030 si los europeos no logran optimizar el uso de la energía o popularizar nuevas fuentes. La comisaría que dirige Loyola de Palacio proyecta realizar una ronda de visitas a los países productores de petróleo y gas natural para tratar de garantizar el abastecimiento en las próximas décadas.
28 ene 2001 . Actualizado a las 06:00 h.La dependencia energética de la UE de sólo un puñado de países situados en Oriente Medio y de su vecino del norte, Rusia, ha llevado a los técnicos de la Dirección General de Energía y Transporte de la UE a reflexionar sobre los problemas de abastecimiento que puedan presentarse en el futuro a medio plazo, tanto por el incremento del consumo interno como por el hecho de que los proveedores comunitarios sean países no occidentales y con ciertos problemas de estabilidad sociopolítica. Es el caso de Rusia, de donde procede el 40% de las importaciones de gas natural, o de Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos y Kuwait, en el capítulo de abastecimiento de petróleo. La fuerte dependencia de países calientes se une a que sólo el 5,6% de toda la energía consumida es de origen renovable, mientras que el objetivo es elevar este listón hasta el 12% en el año 2010. Así lo expresó el jefe de la Unidad de Comunicación y Difusión, Samuel Furfari, en una conferencia celebrada en Vigo y organizada por el Eixo Atlántico. Con vistas a reequilibrar esta situación y detener la escalada de provisión energética procedente del exterior, la comisaría que dirige Loyola de Palacio -basándose en las aportaciones del Libro Verde de la Energía y del Transporte- prevé realizar en los próximos meses una ronda de visitas a los principales centros de poder energético del planeta, entre los que se encuentra la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), Estados africanos y Rusia. La idea básica de De Palacio, según fuentes de la Unión Europea, es normalizar las relaciones y asegurar el abastecimiento al bloque comunitario en las próximas décadas.