La Federación de Asociaciones de Concesionarios de Automoción (Faconauto) ha hecho balance tras la entrada del Plan 2000E, aprobado por el Gobierno español para incentivar la venta de vehículos mediante la concesión de ayudas directas. En el sector de particulares, en la primera semana de junio se realizaron en Galicia 707 matriculaciones, lo que supone un incremento del 10,6% respecto al mismo período del año pasado. El presidente de la patronal, Antonio Romero-Haupold, intervino ayer en un foro de debate en A Toxa donde planteó ideas como la de agrupar a los concesionarios en «ciudades del automóvil» con el fin de dar mejores servicios a las empresas y a los clientes.
-¿Qué valoración le merece el balance de ventas?
-Es espectacular para nosotros. Llevábamos un año pidiendo este plan y los datos demuestran que parece que teníamos razón.
-En Galicia mejoran los datos frente a otras comunidades, donde la tendencia sigue siendo negativa respecto al 2008, caso de Madrid, Cantabria o Canarias. ¿A qué atribuyen este comportamiento tan dispar del comprador?
-La colaboración del Gobierno gallego ha sido muy buena y hubo un buen entendimiento con Acoaga, la asociación de concesionarios de Galicia. Donde se ha informado bien de las ayudas, han aumentado las ventas; donde no se ha hecho, siguen a por uvas.
-¿Cuáles son las expectativas para los próximos meses?
-Esperamos incrementar las ventas un 6% a nivel nacional. Lo que hay que pensar es en si ya estamos sanando o vamos a seguir enfermando más lentamente.
-¿Se aleja el fantasma de la crisis?
-Se aparta y eso es muy bueno. Nosotros vamos a despedir a 30.000 empleados por la caída del mercado que tuvimos, del 50%. Hemos tocado fondo en las ventas, pero ahora la tendencia es positiva.
-¿Cuál es el tipo de coche más demandado?
-Los de baja gama. El Tata Indica, que cuesta 4.500 euros, ya no queda en stock , y eso está pasando en toda las marcas del mercado.