Los aeropuertos de Roma, Fiumicino y Ciampino, están hoy colapsados por la huelga de ocho horas convocada por el mayor sindicato del país (CGIL), que ha obligado a cancelar centenares de vuelos internacionales por lo que largas filas de turistas aguardan la vuelta a la normalidad.
Según fuentes de los aeropuertos, los viajeros, la mayoría de ellos de vuelta a sus países tras las vacaciones transcurridas en Roma, reclaman ante los pabellones de las diversas compañías aéreas en busca de información.
Es el caso de la compañía aérea alemana Lufthansa, de las españolas Iberia y Vueling, de la inglesa British Airways, de la irlandesa Ryanair en el aeropuerto de Fiumicino y de la compañía suiza Easy Jet en el aeródromo de Ciampino.
La compañía italiana Alitalia ya está desviando a sus pasajeros a otros vuelos y lo mismo trata de hacer Iberia y British Airways, informaron a Efe fuentes del aeropuerto.
Las compañías aéreas estiman que esta tarde el servicio volverá a la normalidad, ya que la huelga tiene una duración de ocho horas desde las 09.00 hora local (07.00 GMT) a las 17.00 hora local (15.00 GMT).
El cónsul de España en Italia, Eduardo de Laiglesia, indicó a Efe que muchas personas han llamado desde España interesándose por sus parientes y por la hora de la salida de los vuelos, pero la oficina consular -según dijo- no puede hacer nada.
La Confederación General Italiana del Trabajo (CGIL) protesta contra el plan de ajuste del Gobierno de Silvio Berlusconi, que han calculado será de 45.000 millones de euros, y que consideran que grava a las clases medias y más desfavorecidas.