La canciller alemana se comprometió a mantener el principio de solidaridad en la UE.
25 ene 2012 . Actualizado a las 23:12 h.La canciller alemana, Angela Merkel, dijo que los países europeos deben estar dispuestos a ceder más competencias a la Unión Europea para garantizar el futuro del proyecto europeo. En la inauguración del Foro Económico Mundial de Davos 2012, Mekel instó a algunos países europeos a mejorar su competitividad, al mismo tiempo que se comprometió a mantener el principio de solidaridad en la UE.
Recordó las recientes tensiones entre los países europeos a raíz de la crisis económica y financiera, pero se mostró optimista en que se podrán superar. Alemania no quiere comprometerse con algo que no podrá cumplir, aseguró Merkel, ante jefes de Estado, economistas y empresarios de todo el mundo, a los que aseguró que su país «siempre ha defendido el euro». «En Alemania no queremos encontrarnos en una situación en la que hemos asumido compromisos que no podremos cumplir», dijo Merkel en respuesta a aquéllos que exigen aumentar el capital de los fondos de rescate de la zona euro, lo que no significa que su país se oponga a la solidaridad con los países en dificultades, precisó.
Merkel recordó que el Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF) dispone de 250.000 millones de euros, y el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), ue debe entrar en vigor en julio próximo, de 500.000 millones. «Me pregunto si es creíble (aumentar el capital del MEDE) y a partir de qué peso se puede perder la credibilidad», dijo Merkel. «Si Alemania por ejemplo, en nombre de todos los otros países miembros (de la Eurozona) prometiera algo, y los mercados nos atacaran (y) no pudiésemos cumplir, entonces habríamos abierto un flanco», dijo Merkel antes de subrayar que en «muchas, muchas ocasiones hemos demostrado que somos serios con la solidaridad y los compromisos».
La canciller alemana aseguró que Europa está dispuesta a abordar la crisis de deuda pero reconoció que se sacaron pocas lecciones de la crisis. «Todavía no basta», apuntó Merkel respecto a las lecciones puestas en marcha tras la crisis. La canciller alemana aseguró que Europa está dispuesta a abordar el problema de la crisis de deuda pero aseguró que los déficit no se superan «con un golpe de mano».
La mandataria democristiana se mostró decepcionada por la falta de consenso para poner en marcha un impuesto a las transacciones financieras, algo que supondría «una fuerte señal política» para los ciudadanos. Merkel criticó además el estado actual de las negociaciones sobre el cambio climático. «Queda mucho por hacer», afirmó.